A Rihanna no le quedó más remedio que demandar a su padre, Ronald Fenty, por uso indebido de su nombre y así sacar beneficio económico de él.
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De acuerdo a documentos de la corte federal de Los Angeles —publicados por el portal The Blast—, el hombre creó una empresa en 2017 que hacía negocios con la marca "Fenty Entertainment" sin que ella estuviera involucrada en ninguno de los proyectos.
Siguiendo con las actas, el padre de Rihanna negoció una gira por Latinoamérica sin la autorización de la artista por US$ 15 millones.
La mujer de "Umbrella" aclara que ella no tiene ningún vínculo legal con Fenty Entertainment y que se le pidió a Ronald Fenty que dejara de utilizar su nombre en sus planes profesionales.
"A pesar de que el señor Fenty es el padre de Rihanna, él no tiene y nunca tuvo autoridad para actuar en nombre de ella", dice uno de los documentos.
Además de su carrera como cantante y actriz, la estrella del pop nacida en Barbados actualmente se desempeña como empresaria de la moda. A través de su firma Fenty, ha popularizado líneas de maquillaje, calzado y lencería, y ese fue el nexo del que Ronald Fenty se agarró para ganar dinero a costa de su hija.