El costo de pertenecer a la realiza británica es bastante alto. Bien lo sabe Meghan Markle, quien es analizada a cada minuto por la prensa británica, ya sea por sus actos, su forma de caminar o la manera en qué viste.

Este último punto ha sido tema de discusión por los medios de comunicación de Reino Unido, quienes notaron que -salvo contadas ocasiones- en los últimos eventos a los que ha asistido la Duquesa de Sussex, ha vestido completamente de negro.

Por ejemplo, una de sus últimos atuendos fue el vestido de gasa negro de Givenchy que lució en su visita a la inauguración de la exposición "Oceanía".

También está el vestido negro de la firma Dior y un sombrero diseñado por Stephen Jones, que usó en la celebración del Centenario de la "Royal Air Force".

Al anterior se le suma un traje de dos piezas de Givenchy en color negro con el que acudió a la celebración de un partido benéfico en Croke Park, Dublín.

Pero todo tiene un motivo. Según The Sun, la elección está estrechamente vinculada con la intensa agenda de actividades sociales y de caridad que realiza la Duquesa de Sussex. La idea, dicen, es que su ropa no haga sombra a la gente que la recibe en estos actos, que son los verdaderos protagonistas de la jornada.

Así lo dejó en claro Karen Haller, experta en psicología del color al mismo medio, quien señaló que "el negro es su manera de desviar la atención de sí misma y así poner el foco en las causas que apoya, ubicándolas como el centro de todo".

Además agregó que "las ocasiones en las que la ex actriz ha decidido vestirse de color oscuro, sugiere que no busca ser el centro de atención. Se siente bien estando en segundo plano".

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