¿Por qué hay un espejo en el ascensor? ¿Para que nos miremos? ¿Para que nos saquemos "selfies"? Según el portal uselessdaily.com, la razón es mucho más profunda.

Los ascensores son espacios cerrados muy pequeños y para las personas el encierro puede producir angustia, aunque sea un trayecto de pocos minutos. 

Entonces, en los ascensores pequeños (la mayoría) suele haber un espejo para dar una sensación de un espacio más grande, de amplitud. Así se alivia la angustia al encierro que a algunas personas les pueda producir el reducido habitáculo del ascensor.

Por otro lado, la existencia del espejo nos distrae. Nadie se resiste a echar una mirada y así se ocupa nuestro tiempo causándonos la impresión de que el trayecto es más corto.

Es por esto que los ascensores de exterior tienen paredes con vidrios transparentes para mostrar lo que pasa afuera y los más modernos tienen pantallas, para dar información y así distraer al pasajero.

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