En 2016 murieron más corales que nunca en la Gran Barrera de Arrecifes en Australia. En la parte norte se vio afectado el 67 por ciento de los corales en aguas poco profundas. Este año, una parte similar en la zona meridional también está amenazada por blanqueamiento. Ahora se teme que los corales se blanqueen de manera tan rápida que su recuperación sea imposible.

Sin embargo, el blanqueamiento continuo que se observa ahora es inédito. Mark Read, del Great Barrier Reef Marine Park Authority, explica que "es normal que el agua tibia se acumule en la Gran Barrera de Coral en verano, pero normalmente se vuelve a dispersar hasta la llegada del invierno”. Y añade, "pero este año, la temperatura del agua no ha descendido en dicho arrecife desde 2016, sino que se ha ido calentando más. Cuando el calor se acumula, los corales pueden resistirlo bien, pero tuvimos un verano especialmente duro en el este de Australia”.

Corales y algas

Cuando el agua está muy tibia, los corales repelen a las algas que son las encargadas de proporcionar los colores brillantes a los corales. Por ello, se vuelven blancos. Sin los nutrientes de las algas, los corales son propensos a contraer enfermedades y pueden morir de hambre. Estos pueden recuperarse, pero necesitan para ello tiempo y corales saludables a su alrededor. Pero si el blanqueamiento de los corales ocurre de forma sucesiva, las posibilidades de recuperación son casi nulas.

"Los corales que crecen más rápido necesitan por lo menos una década para recuperarse. Si el blanqueamiento tiene lugar en un periodo de 12 meses, la posibilidad de recuperación de los arrecifes, los que se dañaron en 2016, es nula”, dice James Kerry, un investigador del Centre of Excellence for Coral Reef Studies (ARC), un instituto dedicado al estudio de los corales.

A diferencia del año pasado, la culpa de las temperaturas récord no solo se debe al fenómeno de El Niño, que causa el flujo de agua tibia en periodos regulares en el Pacífico. Según el ARC, las altas temperaturas del agua de este año pueden ser debidas al calentamiento global.

Ciclones, ventajas y desventajas

Dicho instituto comprobó a través de fotos aéreas tomadas de todo el arrecife que la magnitud del blanqueamiento de los corales se extiende a más de 1.500 kilómetros. Solo el tercio sur del coral no está afectado.

Además, el ciclón que tuvo lugar en marzo posiblemente no haya ayudado a la conservación de los corales. No se ha comprobado si los corales han sufrido algún percance. Read cree que hubo muy pocas tormentas este verano en Australia. "Las tormentas son un arma de doble filo”, dice. "Pueden ser destructivas, como un ciclón tropical, pero las tormentas tienen sus ventajas, porque las nubes, la lluvia y el viento enfrían el agua del mar. Este año no hemos tenido ningún respiro".

Informar con responsabilidad

Según Read, las autoridades evitan los informes de prensa exagerados, como los del año pasado, que afirmaban que el arrecife "ya está muerto”. Tales noticias podrían crear la impresión de que es demasiado tarde para ayudar al arrecife, porque el daño es permanente.

”Cuando los corales sufren de blanqueamiento, no significa que estén muertos”, dice y añade que "una visión tan simple no ayuda. Es más importante destacar la extensión y la capacidad del arrecife para recuperarse”.

La organización Great Barrier Reef Marine Park Authority trabaja, junto con una empresa que promociona excursiones, en la oferta de expediciones en lanchas para observar el arrecife y proteger las zonas en peligro. También plantan semillas de corales para propiciar la recuperación de corales afectados y muertos. Pero todo se toma su tiempo. Si la zona se vuelve a ver afectada por el blanqueamiento coralino el año próximo, la Gran Barrera de Arrecifes en Australia estaría en peligro.

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