La familia del actor Bob Saget entregó los detalles sobre la causa de su muerte el pasado 9 de enero, en Orlando, Florida, Estados Unidos.
El comediante, quien fuera estrella de la serie televisiva "Full House" en las décadas del '80 y '90, fue encontrado muerto a los 65 años, al interior de una habitación en un hotel.
Sin embargo, poco se sabía de los detalles relacionados con la causa de muerte, hasta ahora.
Y es que prácticamente un mes después de su fallecimiento, cercanos emitieron una declaración en la que descartaron de plano que su deceso se haya provocado a partir del uso de drogas o alcohol.
Por el contrario, "las autoridades determinaron que Bob murió por un golpe en la cabeza" de forma accidental, más precisamente en la parte posterior de su cráneo.
"Lo ignoró y fue a dormir", agregaron, citando a los peritajes de la policía.
En otras palabras, falleció debido a un traumatismo craneal.
Golpes en la cabeza: Qué hacer si se sufre uno
A raíz de la muerte de Bob Saget, una de las dudas que se ha planteado es respecto a qué se debe hacer cuando una persona sufre un golpe en la cabeza.
Según recogió People, la doctora Leana Wen, médica de emergencias y académica de políticas y gestión de salud en la Facultad de Salud Pública del Instituto Milken de la Universidad George Washington, apuntó que "cuando te golpeas la cabeza, puedes sangrar de diferentes maneras".
"Un hematoma epidural es un tipo de lesión cerebral. También puede tener un hematoma subdural", agregó, precisando que este último "es muy común".
"Ambos ocurren cuando las venas se rasgan por una lesión en la cabeza, lo que hace que la sangre acumulada ejerza presión sobre el cerebro", añadió la profesional.
Al respecto, la doctora Leana Wen llamó a que "si tiene una lesión importante en la cabeza dígaselo a alguien (...) llame a su médico si está particularmente preocupado, pero al menos debe decírselo a alguien y no estar solo. De esa manera, alguien puede ayudarlo a monitorearlo y asegurarse de que esté bien".
Personas de riesgo y Traumatismos encefalocraneanos (TEC)
La doctora Leana Wen llamó a tener aún mayor precaución si se es una persona de riesgo. "Por ejemplo, si está tomando algún tipo de anticoagulantes".
"Si eres mayor también tienes un mayor riesgo de sangrado en el cerebro", complementó.
Los traumatismos encefalocraneanos (TEC) figuran como la principal causa de muerte en las personas de 20 y 40 años, según una publicación de 2018 de la Clínica Alemana.
Y, además, los posicionan como un problema relevante, ya que un 10% de los casos corresponde a cuadros de carácter grave y "quienes sobreviven quedan seriamente incapacitados".
En esa línea, se detallan que las consecuencias pueden ser transitorias o permanentes, dependiendo de la magnitud del golpe y la edad de la persona afectada.
Entre esas figuran el compromiso de la conciencia, amnesia postraumática, síndrome vertiginoso, mareos persistentes, cefalea holocraneal (en toda la cabeza) persistente y progresiva, vómitos y palidez asociada a inmovilidad.
Recomendaciones ante un golpe en la cabeza
La Clínica Las Condes también entregó una serie de recomendaciones ligadas al actuar posterior a sufrir golpes en la cabeza.
En esa línea, recomendaron asistir de inmediato a un servicio de urgencia si es que existe alteración o pérdida de conciencia tras el golpe; periodos de amnesia o pérdida de memoria ; esté de día y se quiera dormir más de lo habitual; se presente un dolor de cabeza constante y no solo el sitio golpeado; se presenten vómitos; cambios de conducta, como irratabilidad o llanto persistente en caso de niños; salida de sangre o líquido por la nariz u oídos; o padecer de una marcha inestable, exista sensación de hormigueo, se sienta borrosa la visión, se presente un chichón grande; o si el golpe ha sido de alta energía, ya sea una caída de más de 2 metros o un accidente de tránsito importante.
En el caso de los niños, manifestaron que dentro de los rangos normales es esperar que tras un trauma en la cabeza se presenten vómitos, somnolencia y hemorragia, por lo que la recomendación es acudir a un centro asistencial.