Un insólito caso que incluye infidelidad, café, interpretaciones, ChatGPT y un divorcio, ocurrió en Grecia: Una mujer pidió la separación de su marido tras descubrir que había, supuestamente, una tercera persona involucrada.
Después de preparar café griego para ella y su esposo, la mujer tomó fotos de los tazones y le pidió a ChatGPT que los interpretara, siguiendo una tendencia creciente de tasseografía asistida por inteligencia artificial.
La respuesta de la Inteligencia Artificial habría mostrado que el hombre fantaseaba con una mujer cuyo nombre comenzaba con “E” y que esa mujer intentaba destruir su familia.
Ante este escenario, la mujer pidió el divorcio. ¿Y qué dijo el esposo?
“Un día, preparó café griego para los dos y pensó que sería divertido tomarle fotos a las tazas y pedirle a ChatGPT que las 'leyera'", relató.
“Me reí y lo tomé como una tontería. Pero ella no. Me dijo que me fuera, les informó a nuestros hijos sobre el divorcio, y lo siguiente que supe fue que me llamó su abogado”, consigna el hombre al sitio Vice.
El abogado del sujeto argumenta que una interpretación generada por inteligencia artificial de los residuos del café no tiene validez legal. “Él es inocente hasta que se demuestre lo contrario”, afirmó el abogado al Greek City Times.
En redes sociales se ha generado un amplio debate producto del caso. Algunos apoyan a la mujer, señalando que más que una realidad absoluta mostrada por la IA, esta le confirmó una sospecha.
Otros, como era de esperar, quitan toda validez a una interpretación que carece de fundamentos incluso para los que conocen de tasseografía.