Es la líder de Escocia desde 2014, cuando tras el referendo en donde el pueblo escocés decidió mantenerse como parte de Gran Bretaña, el primer ministro anterior tuvo que renunciar. Desde entonces Sturgeon ha empujado a Escocia dentro de las turbulentas aguas del Brexit y, en una conferencia del Partido Nacionalista Escocés (SNP), confrontó la estrategia de la Primer Ministro Británica Theresa May. En su discurso presenta a Escocia como “abierta para los negocios” con el resto de Europa. “Los británicos se están marginando a los bordes de Europa; nosotros planeamos mantenernos en su corazón, donde Escocia pertenece”.

Sturgeon es, por supuesto, la primera mujer en ocupar el cargo político más alto de Escocia. Abogada, antes de llegar al puesto fue política desde los 29 años, luego subsecretaria de salud y de infraestructura; en 2014 se convirtió en la líder de su partido. Es, según el ránking de Forbes, una de las mujeres más poderosas del mundo, ocupando el puesto  50, y la segunda más importante en Gran Bretaña.

Su vida política comenzó a los 16 años, cuando se unió a su partido. Contó a la BBC: “Thatcher era primer ministro, la economía no estaba bien, la gente a mi alrededor veía un futuro inmediato de desempleo y creo que eso definitivamente me dio una fuerte sensación de injusticia social, y en esa etapa,  una fuerte sensación de que estaba mal que Escocia fuera gobernado por un gobierno conservador que ni siquiera habíamos elegido”.

Sturgeon, quien trabajó por años con el anterior primer ministro Salmond, cree que la independencia de Escocia es sólo algo de tiempo. El país hoy no crece al mismo ritmo que el resto de Gran Bretaña, y tiene mucha población adulta. Pero ella ha seguido trabajando por la independencia del territorio, incluso cuando un segundo referéndum aún se ve complejo de ganar. Hoy, mantener las líneas abiertas de la economía de Escocia con Europa, es primordial frente al Brexit.

Cuando llegó al poder, los líderes de los dos partidos políticos más importantes del país también eran mujeres, en un momento sin precedentes en la historia escocesa. Sturgeon, una feminista dijo que esto “mandaba un poderoso mensaje acerca de la igualdad, y romper los techos de cristal”. Cuando se le ha preguntado qué es lo más importante que haría por las mujeres, contestó: “Pago igualitario”.

Uno de sus grandes placeres es ver Borgen, la serie donde una mujer política se convierte en la líder del frío Dinamarca. Sturgeon ha dicho que los conflictos que una mujer se encuentra en un país tan masculino, como muestra la serie, son bastante reales.

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