Fue sorprendente la variedad de respuestas que hubo en la redacción de BBC Mundo al hablar sobre los músculos que resultan más fáciles de trabajar.

Uno se tocó el brazo y señaló su bíceps, otro sacó pecho y habló de los pectorales. Hubo el que tensó su pierna para mostrar sus cuádriceps.

También se mencionaron la espalda, los hombros y los glúteos.

El mayor consenso llegó cuando preguntamos sobre el más difícil de trabajar: los abdominales, aunque alguien alertó de los gemelos.

Pero ¿es así? ¿Realmente se puede generalizar y clasificar los músculos entre fáciles y difíciles de desarrollar?

Juan Francisco Marco, profesor del centro de ciencia deportiva, entrenamiento yfitness Alto Rendimiento, considera que no.

"Es algo que depende muchísimo de la genética de cada persona. Hay gente que desarrolla tanto el bíceps y el tríceps, lo que es el brazo en general, de una forma muy fácil, prácticamente sin necesidad de entrenarlo", le explicó a BBC Mundo.

"Pero hay otras personas que entrenan específicamente esos músculos, varias veces al día, dándole preferencia y no consiguen alcanzar el nivel muscular que pueden tener otros".

Es por eso que hubo tanta variedad de opiniones, porque todos resaltaron el músculo que para cada uno de ellos es más fácil de trabajar, dependiendo de su componente genético.

"Lo que lo determina es la concentración de fibras musculares específicas", comentó el preparador físico español.

"Está demostrado que las personas que tienen las fibras de tipo 2, las que se llaman blancas o de contracción rápida, son las que tienen más capacidad de hipertrofia, y por ende desarrollan los músculos con más facilidad".

"De allí la diferencia entre un velocista, de tipo 2, con un deportista de fondo, que tiene una fibra predominante de tipo 1 o de contracción lenta. El velocista es más explosivo, es más potente, gracias a la fibra que tiene".

Efecto visual

La mayoría de las persona suelen evaluar el desarrollo de su musculatura por un efecto visual, pero este es un método que no siempre es fiable para obtener conclusiones.

Está el caso de los abdominales, que para muchos son los "más difíciles" de trabajar.

"Hasta cierto punto son sencillos de trabajarlos, pero existe el problema que para ver los beneficios en los rectos del abdomen depende muchísimo de la concentración de tejido adiposo que se tenga en esa zona".

"Puedes trabajarlo mucho y desarrollar unos abdominales perfectos, pero si por tu condición genética sueles acumular mucha grasa en esa zona no se te va a ver".

Juan Francisco Marco cree que el trapecio es un músculo que es relativamente fácil de desarrollar porque suele crecer con una mínima carga de trabajo, aunque reitera que depende de la genética de la persona.

De igual forma menciona el gemelo y los deltoides como lo músculos más difíciles ya que son partes que están en constante movimiento y que al estar activas en nuestra rutina diaria ya están muy estimuladas de forma natural.

Es donde entra una variable de percepción.

"Lógicamente que alguien que parte de cero va a ver un cambio en su cuerpo bastante considerable en relativamente poco tiempo, pero al alcanzar un nivel el progreso comenzará a ser más lento", dijo Marco.

"En ese punto se dará cuenta cuáles son sus músculos que progresan más y cuáles menos, es decir, los que resultan más fáciles o más difíciles".

Trabajo específico

Para aquellas personas que quieran luchar contra su músculo "difícil", Marco recomienda entrenarlo con un método preferencial.

"Se trata de hacerlo más veces a la semana y que sea el primer músculo en ser entrenado en cualquier rutina", aunque reitera que es aconsejable mantener una diferencia de 48 horas entre un entrenamiento y otro.

También hay un sistema de entrenamiento, para gente avanzada, que se basa enuna súper serie preagonística, que consiste en enlazar dos ejercicios para un músculo sin descanso entre ellos.

"El primero, que se llama ejercicio analítico, es mucho más localizado, más específico para el músculo. El segundo es uno básico, mas articular, en el que aparte del músculo que se está trabajando, se mueven muchos otros".

De esta manera se consigue es una estimulación mayor de la porción muscular que se quiere desarrollar.

El profesor de Alto Rendimiento aclara que hay que tener cuidado con este tipo de entrenamientos ya que son muy duros como lo indica su propio nombre, preagonísticos, porque hay un agotamiento previo del músculo.

Es más común entre quienes practican el culturismo, pero se puedo extrapolar a cualquier persona que esté en buen estado de forma y quiera trabajar un sector en específico.

Publicidad