Un guía de safaris en África registró el impactante momento en que una manada de leones intenta derribar a una jirafa adulta, un enfrentamiento que se extendió por más de cinco horas.

El video lo grabó el guía Francois Pienaar en la reserva Klaserie Game, cerca del Parque Nacional Kruger, en Sudáfrica, y en sus cerca de dos minutos de duración muestra cómo una de las leonas se sube al lomo de la jirafa y se engancha a ella con sus garras, mientras el resto de la manada le muerde las piernas.

Aunque el guía que captó el ataque lo calificó como el mejor avistamiento de su carrera, la jirafa parece no inmutarse, y simplemente se dedica a caminar lentamente por el terreno esperando que los leones la dejen tranquila, mientras los enormes felinos siguen acosándola e intentando derribarla.

"Los leones querían derribar a la jirafa, porque si lo lograban conseguirían una abundante comida que podría durarles hasta una semana. Pero esta cacería no tuvo buenos resultados, pues hasta parecía que la jirafa les estaba dando un aventón a los leones al otro lado del camino, ¡como la versión africana de Uber!", escribió Pienaar en el canal de YouTube Kruger Sightings.

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David O'Connor, Investigador del Zoológico de San Diego, le dijo a National Geographic que "los leones habitualmente van a por las piernas de sus presas, luego a su espalda y finalmente a la yugular, pero en el caso de las jirafas los leones debieron saltarse el paso final debido a su largo cuello".

"Pareciera que la leona que se subió a la espalda de la jirafa esperaba que sus otros cinco compañeros de manada colaboraran, solo así habrían triunfado, porque una leona sola no podía hacer el trabajo", continúa O'Connor.

"Aunque los leones generalmente prefieren a las jirafas jóvenes, no es inusual que ataquen a un adulto. Lo que es inusual es que se mantuvieran más de cinco horas con ella. No hay escasez de presas más fáciles en Kruger y una jirafa adulta puede matarlos fácilmente con solo una patada", concluye el experto.

La perseverancia finalmente no tuvo buenos resultados, pues la jirafa logró sacárselos de encima luego de cinco minutos y los mantuvo a raya durante las próximas cinco horas, intentando pisotearlos y patearlos cada vez que se acercaban, aseguró el guía, Francois Pienaar.

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