El fiscal regional de Aysén, Carlos Palma precisó que la investigación que lidera por la presunta manipulación de pruebas en el marco de la Operación Huracán es separada a cualquier línea que asuma Carabineros.
"Carabineros está realizando una investigación administrativa, muy distinta a la penal. No hemos dispuesto ninguna diligencia con el FBI", afirmó.
Desde aquella institución se utilizaron una serie de mensajes digitales -presuntamente obtenidos por intermedio de una aplicación llamada "Antorcha"- como prueba para detener a un grupo de comuneros mapuche señalados por organizar atentados incendiarios en La Araucanía, los cuales finalmente fueron sobreseídos por el Tribunal de Garantía de Temuco.
Debido a los cuestionamientos que recibieron dichas pruebas por parte de la Fiscalía, desde la institución policial solicitaron al FBI estadounidense que colabore a confirmar la veracidad de ellas como un auditor externo.
En entrevista con Tele13 Radio, Palma también aclaró el fin del mandato hecho por el fiscal nacional: "El objetivo es determinar si hubo alteración de la evidencia, ese es el delito. No he visto una materialización de la existencia del software".
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