Las líneas rojas de la izquierda ponen en jaque las negociaciones del proceso constitucional
Qué observar. “Esto no se trata de una lista de temas para entregar y que sean corregidos”, dijo la mañana de este martes la presidenta del PS, Paulina Vodanovic.
- El día anterior había participado en un encuentro con los presidentes de la UDI y RN para destrabar el proceso constituyente, que de acuerdo a la última encuesta Cadem tiene un 59% de personas que se inclinan por el Rechazo y un 21% por el Apruebo.
- Vodanovic habría transmitido ese día que entre las 10 colectividades de gobierno hay distintas posturas respecto de qué hacer con él proceso, pero que en lo que hay un acuerdo transversal es que los cambios que se deben hacer a lo aprobado por el Consejo Constitucional deben ser profundos.
- La senadora, además, señaló que el PS no llegará a un acuerdo sin que se incluya a todos los partidos del oficialismo, incluyendo al PC.
- “No se trata sólo de cambios de artículos o de la mera redacción, sino más bien de atender al espíritu que debiera contemplar esta Constitución que es el que está consagrado en las 12 bases, particularmente en cuanto al Estado social y democrático de derecho”, dice Vodanovic a Ex-Ante.
- “Creemos que lo que está avanzando en algunos artículos va en contra de aquello y consagra una libertad económica exacerbada incluso de la propia Constitución del 80. Por lo tanto los esfuerzos no sólo tienen que estar en modificar un articulado, sino que el espíritu sea concorde a las 12 bases”, añade.
- Hasta ahora la alcaldesa Evelyn Matthei y otros actores, como el propio Presidente Boric, han planteado que el texto debe parecerse más al borrador entregado por la Comisión Experta.
Telón de fondo. La senadora Vodanovic sigue participando en las negociaciones, al igual que Diego Ibáñez, el presidente de Convergencia Social, el partido de Boric, que ha sostenido diálogos directos con sus pares del Partido Republicano, Arturo Squella, y de la UDI, Javier Macaya.
- El problema es que, tal como indicó la presidenta del PS, las 2 coaliciones de gobierno partieron las conversaciones sin un pliego de puntos concretos, sino pidiendo cambios radicales al diseño de todo lo aprobado y aspectos que probablemente van más allá de lo que los republicanos están dispuestos a ceder para salvar un proceso del cual tienen el control.
- Hasta ahora el partido de Kast se ha abierto a revisar normas que antes no eran negociables, como la reducción de 155 a 138 diputados (siempre y cuando se respete el criterio de reducir la cantidad de parlamentarios). Lo mismo ocurre con la paridad de salida para las elecciones parlamentarias, que el anteproyecto propuso que actuara cuando algún género superara el 60% de escaños en vez del 50/50, y la objeción de conciencia institucional.
- Pero hasta ahora, al igual que en Chile Vamos, no existe apertura para tocar la agenda económica ya aprobada, que incluye las normas sobre Isapres o AFP. Se trata justamente de una parte de las demandas del oficialismo, que, de acuerdo a distintos consultados, pasan entre otras cosas por lo siguiente:
1) Eliminar el cese del pago de contribuciones para la primera vivienda.
2) Eliminar la conciencia institucional.
3) Cambiar la mención a la protección de la vida de quien está por nacer.
4) Que la mención al Estado social y democrático de derecho vuelva a estar en el artículo 1 de la propuesta de Constitución (el Consejo lo dejó en el artículo 2).
5) Eliminar el párrafo de las Isapres relativo a que “cada persona tendrá el derecho a elegir el sistema de salud al que desee acogerse, sea éste estatal o privado”.
6) Cambiar el artículo sobre derecho a la seguridad social, que explicita que cada persona “tendrá el derecho a elegir libremente la institución, estatal o privada” que administre e invierta los fondos previsionales.
7) Modificar el artículo sobre el derecho a huelga.
8) Reponer los 155 diputados, disminuidos a 138.

El trasfondo y las implicancias del fuego cruzado entre Kast y Matthei
El factor PC. El PC, al igual como ocurrió en el acuerdo del 15-N, hasta ahora no está dispuesto a participar en un acuerdo político que implique ceder posiciones con republicanos.
- Demás está decir que para la directiva recién electa de Lautaro Carmona resulta muy difícil, sino casi inviable, aparecer cediendo posiciones ante sus bases (en su camino a dirigir la colectividad Carmona selló un acuerdo con Daniel Jadue, uno de los más duros críticos del segundo proceso constituyente).
- Carmona desdramatizó un posible rechazo a la nueva Constitución. “Si no se aprueba la Constitución va a seguir rigiendo la vigente, no es que venga el caos y será un debate que estará planteado estratégicamente más hacia adelante. Entonces, vamos a opinar sin la angustia de que el mundo se nos viene abajo pero sí con mucho conocimiento de causa y habiendo demostrado la mejor voluntad de que lográramos un paso adelante y no un paso atrás”, dijo en Radio Infinita.
- “La posición que el PC tome es una posición común junto a los otros nueve partidos de gobierno, esa es una exigencia que nos pusimos”.
- En paralelo, algunos consejeros de izquierda no esconden su escepticismo sobre la negociación para salvar el proceso y, otros, derechamente quieren hacer caer este segundo proceso y endosarle la responsabilidad a los republicanos. Un alto dirigente oficialista lo explica así: “La negociación no puede ser un catálogo de demandas, sino que los republicanos deben renunciar al corazón y el diseño de lo aprobado. Lo contrario podría llevarnos a renunciar a aspectos que para nosotros son intransables, como las AFP o las Isapres”.
Lo que se dice.
Tomás Hirsch, presidente de Acción Humanista (FA). “A esta altura ya no se trata de sacar un artículo en particular, sino que el diseño completo que han ido imponiendo los republicanos claramente se aleja de lo que uno aspira”.
Domingo Lovera, comisionado de RD: “Si se nos ofrece mirar cuatro o cinco temas, dejando todo lo demás como está, me temo que no estaremos cerca de alcanzar esa transversalidad”.
Magaly Fuenzalida, comisionada del FRVS. “Hay cosas importantes en temas de tratados internacionales, para mí en lo personal también corregir lo que se hizo en descentralización, el catálogo de derechos sociales y el capítulo de medio ambiente que aún no se ve en el pleno porque es el último, pero que quedó muy mermado”.
Raúl Soto, diputado PPD. “Un acuerdo que salve el proceso debe dejar atrás la constitucionalización de modelos de provisión de derechos que hoy están controvertidos como las AFP o las Isapres. La señal política debe ser muy potente: Renunciar a la Constitución republicana”.
Alberto Undurraga, presidente de la DC. “En vez de trabajar con una lista de supermercado los temas que puedan ser complejos, más bien hay que abordar los grandes temas. Por ejemplo, no retroceder en derechos: derecho de los trabajadores a la huelga, de las mujeres, de los niños y abordar que tengamos un Estado social de derecho donde la seguridad social esté garantizado”.