VIDEO | Fue condenado por tráfico de drogas, juega con una tobillera electrónica y marcó el gol del ascenso en Brasil
Fue condenado por tráfico de drogas, juega con una tobillera y marcó gol del ascenso en Brasil - Edición/Lance/Globo Esporte
La historia de Yuri de Carvalho da Silva se está robando todas las miradas en el fútbol sudamericano. En el marco de la definición de la Serie B2 del Campeonato Carioca en Brasil entre el Goytacaz FC y Macaé, el jugador marcó uno de los goles del triunfo 4-1 del cuadro local. ¿La particularidad? Se encuentra en prisión domiciliaria y juega con una tobillera electrónica.
Una imagen que rápidamente llamó la atención entre todos los amantes del fútbol. Después de haber igualado 1-1 en la ida, el cuadro se impuso con claridad en la vuelta en el Estadio Campos dos Goytacazes.
Cuando quedaban tan sólo minutos para el cierre del encuentro, Carvalho da Silva condujo el balón con velocidad y superó al arquero, para luego definir con comodidad frente al arco. Su celebración fue alocada, ya que se sacó la camiseta y gritó el gol en el alambrado con la gente. Con este triunfo, Goytacaz FC consiguió el ascenso de categoría.
Irán considera "irracional" dedicar duelo ante Egipto del Mundial a la comunidad LGBTQ+
Cumple condena en Brasil y marcó el gol del ascenso: jugó con tobillera electrónica
A sus 30 años, Yuri fue condenado por tráfico de drogas y asociación ilícita por la justicia brasileña. Permanece privado de libertad desde 2018 y cumple condena en la Casa de Custodia Dalton Crespo de Castro, al norte de Río de Janeiro.
Según consigna el medio deportivo Globo Esporte, el jugador ocupó la tobillera electrónica durante toda la temporada en la Serie B2 de Río de Janeiro, cumpliendo una condena de régimen "semi-abierto".
El citado medio indica que incluso la directiva del club está interesada en renovar su contrato una vez finalizado el campeonato, más allá de su situación judicial. Una fuente interna indica que la tobillera "lo dificulta", pero que no le impide jugar con normalidad. Además, no existe un acápite en el reglamento de la Serie B2 que impida este tipo de objetos en una cancha. Es decir, todo en regla.
