Sequía en Chile: Revisa el balance climático que deja el 2025

Con el cierre de 2025 a la vista, el meteorólogo de Canal 13, Gianfranco Marcone, realizó un balance climático del año, en un país que sigue marcado por la sequía, y planteó una pregunta clave: ¿cómo se comportó el clima en Chile durante este año y qué tan relevante fue para enfrentar el déficit hídrico?

El análisis del experto, compartido a T13.cl, dejó un escenario de contrastes: un verano marcado por el calor, un invierno que no fue de los más críticos dentro del prolongado período de megasequía y una primavera bastante típica, aunque con precipitaciones aún por debajo de lo normal en gran parte del país.

Pensando en la sequía en Chile ¿Cómo estuvo el clima este 2025?

Para responder esa pregunta, Marcone analizó el comportamiento del clima a lo largo de las distintas estaciones del año.

El balance de Marcone comenzó con el verano, que si bien estuvo marcado por altas temperaturas, no alcanzó los niveles más severos de temporadas anteriores. 

“A principios de este año tuvimos un verano bastante caluroso, pero no tan extremo como otros, por ejemplo como el 2024, que fue mucho más caluroso”, explicó el meteorólogo. 

Según el experto, las altas temperaturas se concentraron principalmente en la zona central, con jornadas de calor intenso, pero sin episodios prolongados o récords históricos como los observados en años previos.

Uno de los puntos más relevantes del balance climático 2025 de Marcone está en el invierno. Según explicó, en el contexto de más de una década de sequía, las precipitaciones registradas permitieron un escenario algo más favorable que otros años.

“Tuvimos un invierno, en el contexto de la 'megasequía', bastante bueno, pensando en estos últimos 14 años”, señaló el meteorólogo. Sin embargo, advirtió que este mejor desempeño no significa que se haya alcanzado la normalidad climática.

“Si vamos a la normalidad, es un año que se va con un pequeño déficit en gran parte del país”, precisó.

De hecho, según Marcone, solo un número reducido de ciudades cerrará el año con superávit de precipitaciones (que ha llovido más de lo normal), y en montos muy acotados. En contraste, la mayoría del país presenta déficits relevantes.

“Prácticamente el resto se va con un déficit importante de un 10 a 15%, y ciudades como Chillán se van con un déficit cercano al 40%, siendo donde menos precipitación cayó este año en relación con su normalidad”, advirtió.

¿Fue un mal año entonces? La respuesta depende del punto de comparación. “Si miramos el contexto de la 'megasequía', claramente no es un año tan malo, porque cayó nieve y porque el déficit es pequeño”, explicó el meteorólogo.

No obstante, al compararlo con los promedios históricos, el balance sigue siendo negativo. “Si miramos la normalidad para esta zona, claramente estamos con un año al debe en cuanto a precipitaciones”, agregó.

Por otro lado, la primavera 2025 tuvo un comportamiento bastante típico, con variabilidad térmica e inestabilidad ocasional.

“Fue una primavera bastante de libro, como tiene que ser, con inestabilidades y precipitaciones ocasionales, no con tanta agua”, detalló Marcone.

De cara al cierre del año y al inicio del verano 2026, el pronóstico apunta a una tendencia al alza en las temperaturas, aunque con variaciones.

“Los últimos días del año tienden a ser cada vez más cálidos, pero siempre con esa intermitencia de días menos cálidos entre medio de días calurosos”, concluyó Marcone.

Así, su balance climático 2025 deja en evidencia que, aunque el año no fue de los más críticos dentro de la sequía, Chile aún enfrenta un escenario de déficit de precipitaciones, un factor clave de cara a los desafíos climáticos de los próximos años.