Apoyo a la eutanasia en Chile sigue alto, pero baja sostenidamente, según Criteria
La más reciente Encuesta Criteria, correspondiente a la última medición de septiembre de 2025, no solo abordó la competencia presidencial, sino que también entregó importantes indicadores sobre el debate en torno a la eutanasia y los cuidados paliativos en Chile.
El estudio, realizado entre el 23 y 25 de septiembre mediante un panel online, revela que si bien existe una clara mayoría a favor de la muerte asistida en ciertos contextos, el respaldo ciudadano ha disminuido en los últimos años.
Frente a la pregunta sobre cuál postura representa mejor su visión sobre la eutanasia en casos de enfermedades terminales, un 72% de los encuestados considera que esta práctica debería ser una opción disponible para quienes la soliciten, reconociendo que, aunque los cuidados paliativos son fundamentales, no reemplazan el derecho a una muerte digna. Por otro lado, un 28% rechaza la eutanasia en cualquier circunstancia, prefiriendo enfocar los esfuerzos en garantizar un acceso universal a tratamientos paliativos de calidad.
A pesar de que el respaldo a la eutanasia sigue siendo mayoritario, los datos muestran una tendencia a la baja: en comparación con 2021, el apoyo ha disminuido en 10 puntos porcentuales. Esta caída es aún más notoria al observar las cifras desde 2018, lo que sugiere un cambio gradual en la ética o prioridades del electorado frente al tema.
Apoyo a la separación entre Iglesia y Estado en debate por la eutanasia
Cuando se desglosan los tipos de eutanasia, la llamada eutanasia pasiva, es decir, la posibilidad de suspender tratamientos médicos, cuenta con un 62% de apoyo, mientras que la eutanasia activa, que implica la autoadministración de medicamentos para morir, alcanza un 54% de respaldo. Ambas cifras también presentan una baja respecto a mediciones anteriores, lo que refleja un cambio en la percepción de la sociedad en dichos ámbitos.
En cuanto a la relación entre eutanasia y cuidados paliativos, un 65% de los encuestados opina que una ley que garantice cuidados paliativos no sustituye el derecho a la eutanasia, mientras que un 35% considera que dicho acceso universal sí podría ser una alternativa válida para evitar la legalización de la muerte asistida.
Por otro lado, en cuanto a la discusión sobre el rol de las instituciones religiosas en este debate, el estudio muestra que la mayoría de los encuestados prefiere mantener una clara separación entre Iglesia y Estado. Solo un 22% cree que las iglesias e instituciones religiosas deberían intervenir en debates parlamentarios sobre temas como la eutanasia, mientras que un 57% considera que no deben hacerlo. El restante 21% se mantiene neutral o sin una postura clara al respecto.
Al abordar la objeción de conciencia en caso de aprobarse una ley de eutanasia, la mayoría de los consultados se inclina a favor de permitir que los profesionales de la salud puedan abstenerse de participar por motivos éticos, morales o religiosos. Un 54% apoya firmemente este derecho, mientras que un 29% está en desacuerdo y un 17% no expresa una opinión definida.
Finalmente, la encuesta también evidencia que los sectores identificados con la derecha son más reacios a aceptar la idea de la eutanasia, por el contrario, quienes se identifican con la izquierda la posicionan como un derecho que debería estar disponible para quienes lo requieran.
