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Costadoat acusa censura y critica a rector Sánchez: "En la UC hay miedo"

Costadoat acusa censura y critica a rector Sánchez: "En la UC hay miedo"
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El teólogo desvinculado cuestionó la libertad de cátedra en el plantel.

El académico de Teología que fue desvinculado de la Universidad Católica tras no ser renovada su misión canónica, Jorge Costadoar, expresó una dura crítica a la institución. 

Mediante una carta en El Mercurio, el catedrático puso en entredicho la libertad de cátedra de la casa de estudios, refutando los dichos del rector Ignacio Sánchez, a quien apuntó por avalar la decisión de la Iglesia. 

FEUC rechaza desvinculación del profesor Jorge Costadoat

La carta de Costadoat

En la Universidad hay miedo. Me consta que hay profesores que se sienten vigilados por su vida o su modo de pensar. Hay temas censurados
Jorge Costadoat

"Compartimos con Ignacio Sánchez, rector de la PUC, lo más importante: un enorme amor por la universidad.

Pero tenemos diferencias. El rector afirma que ‘en la UC existe libertad de cátedra para sus profesores e investigadores’. Tengo reparos. Las reacciones ante la decisión de cardenal Ezzati de no renovar mi ‘misión canónica’ demuestran que los académicos perciben que se sienta un mal precedente de censura que hace mal a la Universidad. Confirman que en la Universidad hay miedo. Me consta que hay profesores que se sienten vigilados por su vida o su modo de pensar.

Un agnóstico, un judío, un musulmán, un protestante, incluso un católico que no logre entender la enseñanza de la Iglesia o discrepe de ella, académico o alumno, debiera sentirse en la PUC integrante de primera categoría
Jorge Costadoat

Hay temas censurados. Hay gente que suele escribir cartas a las congregaciones romanas de la Educación y la FE, y entre los de aquí y los de allá atenazan a la Universidad.

La UC, en virtud de su fe en Cristo que nos liberó para la libertad (cf.Gál 5,1), debiera ser líder en libertad de cátedra y libertad de conciencia. Mi ideal de universidad, que extraído del credo cristiano y de los documentos del Magisterio, me impide concebir una universidad católica con profesores y alumnos de dispar integración, dependiendo de motivos extraños a la naturaleza misma de cualquier universidad.

Un agnóstico, un judío, un musulmán, un protestante, incluso un católico que no logre entender la enseñanza de la Iglesia o discrepe de ella, académico o alumno, debiera sentirse en la PUC integrante de primera categoría. En la universidad, todas las diferencias y las pruebas y errores en la búsqueda de la verdad, debieran considerarse igualmente valiosas.

Nunca se me dijo con claridad suficiente en qué consistían esos reparos. Solo me dio por escrito una carta en la que monseñor Ezzati me solicitaba adhesión al magisterio de la Iglesia. Todavía no entiendo de qué se me acusa.
Jorge Costadoat

Chile necesita universidades verdaderas: con libertad académica y concentradas en el servicio público. La UC tiene esta vocación, sin duda. La cumple con los numerosos académicos que nos dedicamos por entero al bien del país. Además de las iniciativas de extensión, de voluntariado y de solidaridad con la sociedad, que en la PUC son muchísimas, enriquecen este servicio.

Pero las autoridades de la Universidad deben ordenar la casa. Tienen que introducir mejoras en la condición de libertad que requiere el trabajo universitario.

El rector señala que el Gran Canciller ha adoptado la medida de no renovarme la ‘misión canónica’ en razón de ‘algunas falencias en mi quehacer teológico y docente que requerirían atención.

Recuerda que monseñor Ezzati, al momento de concederme la ‘misión canónica’ en 2012, me hizo reparos en este sentido y me dio el permiso académico bajo condiciones.

Chile necesita universidades verdaderas: con libertad académica y concentradas en el servicio público.Pero las autoridades de la UC deben ordenar la casa. Tienen que introducir mejoras en la condición de libertad que requiere el trabajo universitario.
Jorge Costadoat

Nunca se me dijo con claridad suficiente en qué consistían esos reparos. Solo me dio por escrito una carta en la que monseñor Ezzati me solicitaba adhesión al magisterio de la Iglesia.

Pero ahora, en marzo de 2015, el Gran Canciller no ha dicho en qué he incumplido esta adhesión. Todavía no entiendo de qué se me acusa. Su objeción central tuvo que ver con enseñar con una libertad inconveniente a personas que no estaban preparadas para ello.

Por otra parte, Fredy Parra, decano de Teología, en 2014 me felicitó por mi desempeño y, tra oír al consejo de calificación académica, pidió al obispo la renovación de la ‘misión canónica’.

De un modo semejante, esta ‘misión canónica’ había sido solicitada al Gran Canciller en 2010 por Joaquín Silva, el decano en esa época. En una carta en que el profesor Silva me avisaba de la evaluación del consejo y de la petición a monseñor Ezzati del permiso para enseñar, me decía: ‘al mismo tiempo, la comisión me ha solicitado que te comunique una observación positiva y felicitaciones por tu desempeño en los diversos ámbitos de la vida académica de nuestra Facultad (12 de julio de 2010)". 

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