Vecinos de Padre Hurtado reunieron más de $15 millones para instalar portones antirrobos pero ahora serán multados por el municipio
Una insólita situación viven los vecinos de la comuna de Padre Hurtado, región Metropolitana, luego de que fueran autorizados para instalar portones antirrobos, pero recientemente los notificaron con que los multarán.
Según expusieron en el programa del 13, La Tarde es Nuestra, los vecinos habían denunciado que sufrían un portonazo diariamente.
Ante esto, habían considerado cerrar los pasajes, por lo que fueron autorizados por el alcalde de la comuna, Felipe Muñoz, para la instalación de los portones.
Según informaron, los vecinos reunieron más de $15 millones para concretar la instalación de los portones antirrobos.
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Los habitantes acusan que llegó personal de la Municipalidad de Padre Hurtado y los fiscalizaron, entregándoles un papel donde los citaron para confirmarles la multa. Sólo alcanzaron a instalar dos infraestructuras en la vereda.
"Nosotros estamos bien complicados. Creímos en el alcalde, pensamos que estaba bien comprometido con los vecinos, pero al final no ha sido así y lo único que nos han hecho es guerra. Juntamos el dinero con los vecinos, pero es pérdida", señaló Fernando, uno de los denunciantes, en conversación con el programa del 13.
"Desde que empezamos a construir, el primer día nos vinieron a inspeccionar, a decir que no se podía (...) pareciera que estaban aportillando el proyecto", complementó el vecino.
Según indicó el vecino, la multa va desde 3 a 10 UTM, es decir, cerca de 207 mil a 692 mil pesos chilenos.
La autorización del alcalde de Padre Hurtado
En el programa del 13 mostraron el archivo de cuando el alcalde de la comuna, Felipe Muñoz, se comprometió con la seguridad del sector, luego de las constantes denuncias que realizaban los vecinos ante la gran cantidad de portonazos que se habían registrado en el lugar.
"Es importante decirle a los vecinos que ya lo conversamos. Hay temas que son normativos, quizás en la norma no se puede poner un portón en alguna calle o pasaje que no esté normado, pero ellos saben, yo lo he dicho: si es necesario que yo me amarre para que los vecinos se sientan más seguros, créanme que lo voy a hacer", dijo en la instancia.
"Mi lealtad está con los vecinos y no con las personas que están en un estado de privilegio totalmente distinto y que no viven esta situación en el día a día", siguió el edil en esa oportunidad.
