Las fallas tecnológicas también pueden llegar a afectar los dispositivos elegidos para una práctica tan sensible e íntima como los juguetes sexuales.
Durante este 2020, varios sitios web especializados en tecnología han destacado los problemas del cinturón de castidad Cellmate Chastity Cage de la firma china Qiui, donde una falla en la app que controla el aparato atascó los genitales de los usuarios que en aquel momento lo utilizaban.
Incluso, este mismo error puede hacer que cualquier hacker con mínimos conocimientos se apodere y maneje a su antojo los dispositivos, además de robar datos personales.
"¡La aplicación dejó de funcionar completamente después de tres días y quedé atascado!", expresó uno de los afectados por esta suerte de candado que se ajusta a la forma de los genitales y que se abre o cierra de acuerdo al gusto del usuario como una clásica práctica erótica del BDSM (Bondage, Disciplina, Dominación, Sumisión).
Esta vulnerabilidad en la app que controla el dispositivo físico ha hecho que algunos, incluso, hayan tenido que utilizar otros elementos para cortar el Cellmate Chastity Cage en pleno uso, generando un peligro grave a su anatomía.
En declaraciones entregadas a The Verge, una de las víctimas declaró que "este software es peligroso, ¡no lo uses!". "La aplicación dejó de abrirse después de una actualización. Esto es aterrador, dada la cantidad de confianza que he depositado en ella, y el sitio (de Qiui) no ofreces ninguna explicación", expresó otro. "¡Mi pareja quedó atascada! Esto es ridículo. ¡Muy peligroso! Y aterrador! Dado lo que la aplicación controla, es menester que sea fiable", añadió un tercero.
Según TechCrunch, las primeras alertas fueron recibidas en junio, pero Qiui no pudo suspender su interfaz de programación de aplicaciones por miedo a que otros usuarios quedaran atascados al instante. Así, lanzó una API distinta para los nuevos usuarios, pero dejó a los más antiguos con los inconvenientes ya señalados.
"El director ejecutivo de Qiui, Jake Guo, dijo a TechCrunch que hacia agosto habría una solución, pero esa fecha llegó y pasó", publicó el medio citado anteriormente. La empresa, además, señaló que entre más arreglos aplican, más problemas crea.
Ante la arremetida de usuarios afectados y de los medios de comunicación, la firma china publicó un comunicado donde le bajan el perfil al asunto, asegurando que si el Cellmate Chastity Cage deja de funcionar, se puede abrir simplemente con un destornillador o una herramienta similar.
"Dada la facilidad con que se produjeron estos hallazgos, y dado que la empresa actualmente trabaja en otro dispositivo que presenta potencialmente un daño físico mayor (un cinturón de castidad “interno”), nos sentimos obligados a publicar esto", explicó la empresa de seguridad Pen Test Partners, que descubrió que los piratas informáticos podían robar datos personales o acceder a la ubicación de los usuarios.
*La imagen central es referencial
