Un sacerdote brasileño fue sancionado con un año sin poder celebrar misas tras conocerse que asistió a una fiesta disfrazado como cura.
El hecho ocurrió el sábado 17 de septiembre en la fiesta “Aviões Fantasy”de la ciudad de Fortaleza, en donde el padre Renato Welton de Farias Bôto fue con una sotana.
Además, el religioso habría aceptado sacarse fotos con una persona vestida de demonio o diablo.
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Tras hacerse viral el registro, la Diosesis de Sobral llamó a declarar a Welton para “proporcionar las aclaraciones necesarias sobre su conducta inadecuada y absolutamente impropia para un sacerdote”.
A modo de penitencia, el sacerdote deberá tomarse un “año sabático” en el que no podrá dar misas o realizar funciones ministeriales, teniendo que reflexionar sobre su vocación y profundizar sus estudios.
En la misma línea, no podrá publicar más contenido similar en sus redes sociales y deberá cuidar más su imagen y conducta”.
