La NASA tiene planificado enviar una nueva misión a Marte en el 2020. El objetivo es enviar una sonda, parecida al Curiosity, con instrumentos capaces de analizar el suelo marciano para buscar rastros de vida en el planeta rojo.
La NASA estudió datos, durante cinco años, para establecer el lugar más apropiado para el aterrizaje del Mars Rover 2020. El sitio escogido es conocido como el Cráter de Jezero. “Jezero es un terreno geológicamente rico, que podría responder preguntas importantes sobre la evolución planetaria y la astrobiología", argumentan desde NASA.
El cráter tiene un diámetro de 45 kilómetros, formado hace 3600 millones de años y en el lugar había un lago. De hecho se lo bautizó con este nombre por una ciudad en Bosnia Herzegovina cuyo mote significa, precisamente, “lago”.
El sitio escogido contiene sedimentos arcillosos y una gran cantidad de rocas que podrían facilitar la tarea de buscar restos de vida en la superficie marciana.
"Jezero es un terreno geológicamente rico, que potencialmente podría responder preguntas importantes sobre la evolución planetaria y la astrobiología", dijo Thomas Zurbuchen, administrador asociado de la Dirección de Misiones Científicas de la NASA.
El rover probará un método para obtener oxígeno del aire en la atmósfera marciana. Esto ayudará a la NASA a planear los mejores diseños para enviar astronautas humanos a explorar Marte un día.
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