Un espectacular y milagroso registró dejó la carrera de aceleración NHRA Midwest Nationals, en Estados Unidos.

El automóvil que conducía la piloto Leah Pruett resultó destruido en plena carrera, escasos segundos después de haber iniciado su trayecto.

¿El milagro? Que pese a lo impactante del accidente, la piloto resultó ilesa y no hubo heridos.

A través de redes sociales se pudo evidenciar el accidente en plena competencia, donde, luego del arranque de la carrera, el auto que iba a más de 418 kilómetros por hora se desvió y salió despegado de la pista.

Ahí, en el aire, comenzó a destrozarse y se vieron diversos pedazos de éste disparados por el aire.

Pese a todo eso, Pruett salió ilesa, quien, en entrevista con Dragazine, manifestó que "para mí, mi  cuerpo está bien. Mi mente está bien (...) como drag racer, esto es lo que hacemos. Existe un riesgo. Creo que cuanto más rápido puedas volver a la pista, mejor".

REVISA EL IMPACTANTE MOMENTO:

 

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