Fue en el año 1976 cuando Nadia Comaneci, entonces una joven gimnasta rumana de apenas catorce años, sorprendió al mundo entero al conseguir, por primera vez en la historia, una doble puntuación perfecta en los juegos olímpicos de Montreal.

Hoy, a más de cuarenta años de la hazaña, es el hijo de la gimnasta quien comienza a hacer sus primeras armas en el deporte. Así da cuenta la propia Nadia Comaneci, a través de un video publicado en su cuenta de Twitter, donde muestra a su heredero, Dylan Conner, practicando saltos.

El video fue publicado esta mañana, acompañado por la leyenda Great job Dylan Conner ("buen trabajo, Dylan Conner) y suma 1.010 reproducciones.

Publicidad