Graves incidentes, y un tipo de violencia pocas veces visto en un estadio de fútbol, se registraron el jueves durante la semifinal de vuelta entre AZ Alkmaar y West Ham United por la Conference League.
El conjunto inglés se impuso en la cancha del equipo de Países Bajos, AFAS Stadion, y clasificó a la final del torneo. Sin embargo, la celebración de los jugadores visitantes se vio empañada al ver que sus familias estaban siendo agredidas.
Barristas del AZ Alkmaar esquivaron la seguridad al interior del recinto y llegaron hasta el sector donde se encontraban las familias y amigos de los “Hammers”.
Al ver esto, los propios futbolistas del West Ham reaccionaron y pelearon contra los fanáticos locales para proteger a sus familias. Los guardias del estadio, en tanto, no pudieron ante semejante situación, la cual se salió de control por varios minutos.
AZ Alkmaar condenó los hechos y pidió disculpas. “Desafortunadamente no podemos usar la palabra simpatizantes para estas personas. Lo que pasó está más allá de todos los límites. El club vuelve a ofrecer sus más sinceras disculpas al West Ham United y a todos los miles de simpatizantes bien intencionados del AZ que también han sido molestados por la mala conducta”, expuso el club en un comunicado.