El exsenador y exministro de Economía en el gobierno de Patricio Aylwin, Carlos Ominami, forma parte de un grupo de economistas de centro izquierda, entre los que se incluye Roberto Zahler, expresidente del Banco Central, que apoyan a Gabriel Boric. Ominami plantea que el programa del candidato del FA-PC requiere mayor profundización, gradualidad e integrar la experiencia de quienes han sido gobierno.

-El expresidente Ricardo Lagos ayer dio su apoyo a Gabriel Boric, lo que ha sorprendido pues el Frente Amplio y el PC lo han cuestionado duramente. Lo acusan de haber profundizado el modelo.

-Lagos es un punto de referencia y por eso me parece muy significativo; es un acto de generosidad de su parte, porque no es un misterio para nadie que ha sido  objeto de críticas muy ácidas, a veces bastante injustas del FA-PC. Desde ese punto de vista, un apoyo rápido y resuelto como el que está entregando me parece un gran gesto que lo enaltece.

-¿Tú lo esperabas?

-Lagos es un gran demócrata y advierte los peligros que Chile está corriendo hoy día. Alguien como él no se iba a equivocar.

-¿Cuáles son los peligros que representa Kast, según tu opinión?

-Si ánimo de caricaturizar, Kast representa una regresión desde el punto de vista político, cultural y económico. Bajar 10 puntos los impuestos a las empresas impide ampliar los beneficios sociales y produce déficit fiscal. Terminar con el ministerio de la Mujer sería un retroceso respecto a derechos y representatividad que ellas han ganado. No se trata de hacer campaña del terror, pero sí advertir cuáles son los riesgos de su programa.

-Perteneces a un grupo de economista de centro izquierda que están llamando a votar por Boric. ¿Fue algo organizado?

-En abril de 2019 constituimos un espacio, al que llamamos Foro para el Desarrollo Justo y Sostenible, de economistas que tienen la gracia de provenir de vertientes muy distintas. Independientes, militantes desde la DC al FA. En estos días deberíamos completar un listado y esperamos que otros economistas, con los cuales hemos tenido discrepancias, puedan ser parte de este esfuerzo para dar nuestro voto a Boric y ofrecer ayuda programática.

-¿Roberto Zahler, expresidente del Banco Central, está incluido?

-Zahler es fundador del Foro. Ha trabajado activamente en esta instancia, desde sus inicios. Es un punto de referencia en todos los temas macroeconómicos, sin duda. Él está apoyando a Boric completamente.

-¿Cómo se gestó el apoyo al candidato del FA-PC?

-En la asamblea del sábado tomamos la decisión de apoyar al candidato del mundo progresista que resultara ganador. El lunes hubo una reunión de coordinación. El martes le enviamos una carta al candidato, brindándole nuestro apoyo, invitándolo a una reunión. Sería importante poder recibirlo en una asamblea plenaria del Foro, que tiene cerca de 100 integrantes. La carta la firmamos a nombre del conjunto del Foro porque estábamos mandatados por la asamblea para ello.

-¿Escribieron un documento con sus planteamientos?

-Aprobamos en la asamblea del Foro una especie de Ladrillo, por así decirlo, con todas nuestras propuestas. Los Chicago Boys tenían el suyo, nosotros tenemos el nuestro. Este Ladrillo se lo vamos a entregar al candidato, o a su jefe de programa.

-Según analistas, Boric debe hacer cambios importantes en su equipo. Y rápido.  Se compara su actitud con la de Lagos en 1999 cuando pasó a segunda vuelta con Lavín. Él cambió su equipo de inmediato y entre otros tú saliste del comando….

-Esa comparación no es muy pertinente porque Lagos sacó el 48% de los votos en primera vuelta y tenía un 7% de reserva, que era la votación de Gladys Marín y de Tomás Hirsh, si no me equivoco. En ese caso se hicieron cambios que a lo mejor no eran tan necesarios.

-El mismo día de la elección, Lagos dio un famoso discurso, donde dijo que había escuchado a la gente, pero el de Boric ha sido criticado por mantener el mismo tono. ¿Qué te pareció?

– Me gustó lo que dijo Boric el domingo, terminar con la soberbia y el ninguneo de sectores, pero es cierto que es una estética juvenil, un poco ñuñoína.

-¿Quedaste herido con la salida del comando de Lagos?

-Lo que siempre he sentido es que no fue justa. Pero como te digo: la comparación de Boric 2021 con Lagos 99 no viene al caso. Creo que Lagos tenía todas las de ganar, porque tenía una reserva de votos, había salido primero, el trecho entre el 48 y 50% eran dos puntos. Acá entre 26 y 50%, Boric tiene que duplicar tu votación. Es más difícil. Ahora bien, en América Latina en los últimos 10 años, ha habido 52 segundas vueltas y la mayoría ha ganado el que salió primero, es cierto. Pero en un tercio de ellas, en 16,  ganó el que salió segundo.  Entonces entre Boric y Kast hay una diferencia de 2 puntos, perfectamente remontable.

-De todos modos, ¿Kast tiene la primera opción?

-El caso de Kast es más complejo. Para correrse al centro tiene que traicionarse.  El da respuestas simples a problemas complejos. En la medida que tenga que modificar su programa, va a exponerse a contradicciones fuertes.

-¿Qué giros o nuevos acentos tendría que tener el programa de Boric?

-Tiene que profundizar el programa, buscar abrirse a nuevas temáticas aparte de la seguridad.  Yo siento que hay cuatro ámbitos, donde la candidatura de Gabriel tiene que aplicarse. Primero, las regiones. Ahí hay todo un espacio para crecer, sobre la base de tener un planteamiento mucho más nítido en descentralización. Segundo, las mujeres. Creo que en esta elección no se está reflejando la tremenda movilización de mujeres que hubo en 2017, 2018, que fueron anticipos del estallido. Hay que afinar la puntería para poder reencontrarse con ese movimiento de mujer que ha estado ausente. Tercero, la gente de mayor edad.  El FA se centró mucho en una crítica generacional. Es muy importante dar cabida a un reencuentro intergeneracional, porque los mayores de 50 años son los que más votan, tenemos convicción y experiencia. Y cuarto un tema de reconciliación con el mundo de centro izquierda. El FA en algunos momentos lo maltrató.

-¿Qué le cambiarías a la reforma tributaria de Boric?

-Hay un tema con los tiempos. La viabilidad de una reforma tributaria que pueda en tiempos cortos recaudar tanto como ahí se establece es compleja. Hay que revisar bien las secuencias de las propuestas. También hay asuntos que tienen que ver con la experiencia, que es algo que podemos aportar. Yo he conversado con ellos, con el equipo de Grau, y les he hecho ver que lo que hay que hacer es una reforma tributaria que sea muy recaudadora pero que esté muy concentrada en los que tiene más. Que no ocurra lo que pasó con la reforma del segundo gobierno de Bachelet, que trató de resolver todos los problemas y con eso se abrió flancos, porque a todo el mundo le significaba  algún tipo de aumento de los impuestos.

-¿Cómo te enfocarías en los que tienen más?

-Habría que concentrarse en hacer un impuesto a los súper ricos, yo creo que es más eficiente hacerlo por una sola vez, al inicio. Sería un gesto solidario. Hay que hacer un royalty a la minería de entrada, pero pretender resolver todos los problemas tributarios de un paraguazo es un error, porque podemos terminar sin resolver ninguno.

Publicidad