Desde las 8:00 de la mañana y hasta las 18:00 horas, millones de ciudadanos participarán en las Elecciones Presidenciales y Parlamentarias, una jornada clave en la que deberán escoger entre distintos postulantes a La Moneda y al Congreso, entre ellos Jeannette Jara, José Antonio Kast, Johannes Kaiser, Evelyn Matthei, Franco Parisi, Harold Mayne-Nicholls, Eduardo Artés y Marco Enríquez-Ominami.
Es en este contexto que muchos votantes se preguntan qué ocurre si, por error o nerviosismo, llegan a inutilizar su papeleta dentro de la cámara secreta.
Para estos casos, el Servicio Electoral (Servel) mantiene un protocolo claro que busca proteger el derecho a voto y garantizar la transparencia del proceso. Según la normativa, cualquier elector que cometa un error al marcar su preferencia, ya sea por tachaduras, marcas fuera del recuadro o cualquier acción que invalide la cédula, puede solicitar una nueva papeleta sin inconvenientes.
Los vocales de mesa están facultados para entregar una segunda cédula electoral o voto, dejando registro de lo ocurrido en el acta correspondiente. La primera papeleta debe ser marcada como inutilizada y almacenada junto a las demás, sin ser considerada en el escrutinio.
Sin embargo, existe una limitación importante, a grandes rasgos el votante solo puede equivocarse una vez y salir relativamente rápido de su local de votación, si se vuelve a estropear la segunda papeleta, deberá esperar hasta el cierre de la mesa. Solo si quedan cédulas disponibles al finalizar la jornada, podrá emitir su sufragio con una papeleta sobrante. Esta medida permite asegurar la correcta administración del material electoral y, al mismo tiempo, garantizar que el elector no pierda su derecho a participar en las elecciones.