Este miércoles se llevó a cabo la premiación del concurso Mujer Empresaria Turística. Este año, las ganadoras resultaron ser empresarias de Caldera, en la región de Atacama y de Rapa Nui, en la región de Valparaíso, quienes desde sus ámbitos brindan a los visitantes experiencias auténticas al valorar las tradiciones y las costumbres del entorno en que desarrollan sus servicios.
Para la edición de este año, postularon 300 mujeres de todo el país, micro, pequeñas y medianas empresarias que en la última década de concurso se suman a las más 4.800 que ya han participado de esta iniciativa conjunta entre el Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género, Sernatur y BancoEstado.
El concurso Mujer Empresaria Turística 2019 premió los innovadores emprendimientos de representantes de las regiones de Atacama y Valparaíso. Por una lado, está Tiska Bicicletas, taller de bicicletas donde Camila Ahumada Tiska arrienda este tipo de vehículos, sin embargo, la operación más importante de este negocio son los servicios turísticos de rutas guiadas por sectores costeros y patrimoniales en la región de Atacama.
Camila Ahumada Tiska (de Caldera) y Alejandra Rojas Alabarce (de Rapa Nui) fueron las ganadoras del concurso y de $2.000.000 para cada una, además de un kit audiovisual
Al haber vivido toda su vida en Caldera, la empresaria de treinta y dos años siempre tuvo la inquietud de desarrollar un turismo que potenciara las cualidades y la belleza de la ciudad. Esto, sumado a su amor por las bicicletas, ideó esta actividad de turismo aventura.
Tras recibir su premio, Camila demostró su emoción, ya que en 2017 el mismo premio, pero a nivel regional. Cuenta que “ya en ese momento había sido muy emocionante. Ahora, ganar el premio nacional es mucho más, sobre todo en estos tiempos que están difíciles para el país. Me dio mucha emoción que dentro de todo aparezca este premio, que es un aporte para la ciudad, pero más que nada un reconocimiento de que estoy haciendo algo bueno por el desarrollo y la economía. Estoy muy orgullosa de mí y feliz”.
Por su parte, está el caso de Alejandra Rojas Alabarce, quien con su empresa Snorkeling Rapa Nui no solo diversifica la oferta turística de Rapa Nui, sino que, a su vez, permite que niños, niñas, jóvenes y adultos locales se conecten con el mar, un elemento fundamental para la cultura en la isla.
En un dive bus, el primer centro de buceo móvil adaptado del país, Alejandra, de treinta y cuatro años, cuenta con todas las condiciones e instalaciones para que las personas accedan con sus sillas de ruedas y otros aparatos de apoyo. Así pueden recrearse en una de las aguas más hermosas del mundo, que regalan más de cuarenta y cinco metros de visibilidad y una fauna de ensueño.
La empresaria del archipiélago manifestó que este premio “significa abrir puertas para todas las mujeres de la isla que luchan día a día por su emprendimiento. A veces no son muy visibles, pero haber ganado es destacar a Rapa Nui y a muchos emprendimientos más, no solo el mío. Sin duda, esto les va a dar mucho ánimo y fortaleza para seguir con lo que hacen”.