Hay mucho relojes autodenominados inteligentes en el mundo: están el Sony Smartwatch, el Moto 360, el futuro Apple Watch, el LG Watch R y varios de Samsung. El asunto es que todos requieren de un smartphone para funcionar al 100%.

Samsung presentó en Chile el Gear S, su primer modelo que se conecta a la red a través de 3G sin depender de un teléfono, aunque sí requiere de un plan de datos extra. Con esa conexión permite incluso contestar llamadas remotas directamente en la muñeca.

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El reloj, que cuenta con un registro de las actividades físicas y un GPS a bordo, tiene una batería que dura dos días y es resistente al polvo y al agua, pudiendo estar hasta media hora a un metro de profundidad.

Además, se pueden revisar noticias y hasta contestar mails y mensajes breves en su pantalla curva de 2 pulgadas. Eso sí, el Gear S no es accesible a todos: cuesta 280 mil pesos y está a la venta en las tiendas.

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