Qué observar: El miércoles 6 el director nacional de Gendarmería, Sebastián Urra Palma, expuso en forma telemática ante la comisión de Seguridad Ciudadana de la Cámara de Diputados, que esa jornada aprobó la idea de legislar del proyecto de ley que elimina los beneficios a condenados por delitos que afecten la integridad física de Carabineros, funcionarios de Investigaciones y Gendarmes.

  • Se trataba de la denominada Ley Naín, en referencia al cabo Eugenio Naín, asesinado con un tiro el 30 de octubre de 2020 cuando llegó en una patrulla a un bloqueo de la Ruta 5 con neumáticos prendidos, a la altura de Metrenco, en La Araucanía.
  • Urra valoró la iniciativa y detalló lo que describió como el día a día de sus funcionarios, que en mayo de este año atendían a 47 mil internos en el sistema cerrado, muestran estadísticas de la institución, de una población total de 106 mil.
  • Estos gendarmes supervisan a una población en muchos casos hacinada. De acuerdo con un estudio del Instituto Nacional de Derechos Humanos publicado en enero, el sistema carcelario chileno cuenta con 83 unidades. De éstas, 45 tienen un nivel de ocupación que excede su capacidad, y 19 superan el 140% de ocupación, considerado como nivel crítico.
  • La institución cuenta con alrededor de 20 mil funcionarios en el país, 15 mil de los cuales son uniformados.
  • Urra fue designado en abril como director nacional de la institución. “Es un profesional con 30 años en la planta de Oficiales Penitenciarios de Gendarmería de Chile, con clara vocación de servicio público y con vastos años de experiencia y conocimiento en la administración de personas, habiendo recorrido numerosos establecimientos en la Institución”, dijo entonces el Ministerio de Justicia.

Las amenazas: “Gracias señor presidente, siendo bien honesto, voy a ser totalmente honesto, hablamos de que solamente en 2021 hubo 485 amenazas sobre el personal de Gendarmería; maltrato de obra a Gendarmería (hubo) 180 denuncias; intentos de agresión, 58, que es lo que se denunció, no es lo que indican las cifras negras”, dijo al comenzar su exposición.

  • “Estando de franco se dan otras aristas como, por ejemplo, la incorporación de fotos de sus hijos con las direcciones claramente evidenciadas en el parabrisas de su vehículo. Incluso hemos recogido, desde hace mucho tiempo ya, una cosa que se está dando y que es muy común y que son las coronas de flores que van a dejar a veces afuera de la cárcel, con el nombre del funcionario para amedrentarlo, y además los llamados telefónicos, en que cuando uno hace el rastreo después no existe tal número, donde amenazan abiertamente al funcionario para que no siga efectuando su trabajo de forma correcta dentro del establecimiento”, aseguró.
  • “Eso viene dándose desde hace mucho tiempo. Ellos ubican la casa de funcionarios que han tenido incluso que pedir la salida de los establecimientos penales; tenemos el caso reciente de Rancagua donde el oficial que estaba a cargo de la OSI (Oficina de Seguridad Interna) en ese establecimiento tuvo que ser derivado a otra región del país por cuanto estaba recibiendo amenazas derechamente de muerte”.

Los centros de reinserción social: El director detalló que estas situaciones no sólo ocurren dentro de las cárceles, sino que también en el sistema abierto.

  • “Lo mismo se da en el caso de los CRS (Centros de Reinserción Social), las personas que trabajan con los sistemas abiertos, donde por concurrir a la misma zona donde vive la población penal en este caso o las personas que son nuestros usuarios, reciben maltratos y amenazas directas en el lugar por el informe que están evacuando”.
  • “Eso también es recurrente y está el miedo de ir a los lugares. Y aun cuando está la opción de hacerlo a través de videollamadas, hay situaciones que éstas deben ser vistas directamente, dado que las percepciones que toma el sicólogo o asistente social solamente pueden tomarlas cuando están frente a la persona; si acaso está mintiendo, si hay algún guiño o hay alguna situación que puedan ir observando, que quede reflejada lo más sensatamente posible en el informe que ellos evacúan”.

La corrupción: El director nacional también declaró que una situación que enfrenta la institución es la corrupción de gendarmes que acusan a funcionarios probos con delincuentes.

  • “A veces nuestros propios colegas, nuestros propios colegas, se prestan para dar datos respecto de estos colegas”, dijo.
  • “Cuando hablo de colegas son estos colegas mal habidos, que es un fenómeno que también estamos enfrentando, que es la corrupción de parte de estos señores funcionarios que, usando nuestro uniforme, y viendo que el colega está evitando que ellos provoquen daño con el ingreso de elementos prohibidos o entregando antecedentes que no debieran llegar a manos de los usuarios, aun así lo hacen, y con el consiguiente daño que provocan a aquellos funcionarios que sí efectúan su pega de forma correcta y adecuada en el día a día”.
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