El escándalo por la supuesta relación entre el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y la actriz porno Stormy Daniels no da tregua a la Casa Blanca.

La estrella de cine para adultos demandó la semana pasada a Trump para invalidar un acuerdo de confidencialidad que firmó en 2016 y por el que se comprometió a no revelar detalles del supuesto affaire.

Además, la actriz, cuyo nombre real es Stephanie Gregory Clifford, ofreció este lunes devolver los US$130.000 que recibió del abogado personal del mandatario, Michael Cohen, para así dar por terminado el acuerdo y poder hablar libremente de lo sucedido.

Sin embargo, todavía nadie sabe a ciencia cierta cuáles serían las implicaciones reales que podrían tener para el presidente la revelaciones de la actriz, que según la Casa Blanca son falsas.

Pero ¿por qué es importante esta historia? ¿Qué se sabe actualmente de lo que supuestamente ocurrió?

Aquí te damos algunas claves para entenderla

1. ¿Quién es Stormy Daniels?

Clifford nació en Louisiana en 1979 y se inició primero en la industria del cine para adultos como actriz y luego, en 2004, directora y guionista.

Su nombre artístico, Stormy Daniels, proviene del bajista del grupo Mötley Crüe, Storm, y del whisky estadounidense Jack Daniels.

Se dice que eligió este último luego de leer un anuncio que decía que la bebida era "una de las favoritas en el sur" de Estados Unidos.

La actriz tuvo algunos roles y pequeñas apariciones en otras películas como "Virgen a los 40", "Ligeramente embarazada" y en el video musical de la canción Wake Up Call, de Maroon Five.

También pensó en postularse para un escaño en el Senado por Luisiana en 2010, pero suspendió su campaña luego de considerar que su candidatura no se tomaba en serio.

2. ¿Cuál es su argumento?

Todo se remonta a julio de 2006, cuando la Casa Blanca era apenas una aspiración para Trump.

Daniels asegura que lo conoció en esas fechas en un torneo de golf de caridad en el lago Tahoe, un área turística entre California y Nevada.

En una entrevista de 2011 con In Touch Weekly dijo que Trump la invitó a cenar y que fue a su encuentro en la habitación de su hotel.

"Estaba tirado en el sofá, mirando la televisión o algo así. Llevaba pantalones de pijama", recordó.

Daniels alega que ambos tuvieron relaciones sexuales, aunque el abogado de Trump "niega vehementemente" esto.

Si el relato de Daniels es cierto, la relación tuvo lugar solo cuatro meses después del nacimiento del hijo más pequeño de Trump, Barron.

La actriz alega que Trump le sugirió que podría llevarla a su programa de televisión The Apprentice y que ambos estuvieron en contacto hasta 2010.

3. ¿Cuándo se conoció lo sucedido?

Los rumores sobre el asunto comenzaron a aparecer antes de las elecciones presidenciales de noviembre de 2016.

El Wall Street Journal informó justo unos días antes de la votación que Daniels había estado en conversaciones con el programa "Good Morning America" de ABC para contar todo sobre la supuesta aventura, antes de cortar abruptamente las negociaciones.

4. ¿Por qué la historia es noticia ahora?

Ha sido una historia que ha ido creciendo con el tiempo.

En enero, el Wall Street Journal publicó un artículo en el que filtraba el pago hecho por el abogado.

"Estos son informes viejos y reciclados, que fueron publicados y negados enérgicamente antes de las elecciones", dijo entonces un funcionario de la Casa Blanca.

El abogado negó también la que la relación hubiera existido.

Pero en febrero pasado reconoció que sí había pagado la suma a Daniels, aunque afirmó que ni la campaña Trump ni la Fundación Trump sabían nada sobre el pago, que fue hecho de su propio bolsillo.

La pasada semana, la actriz anunció que estaba demandando a Trump, bajo el argumento de que el mandatario no había firmado el acuerdo de confidencialidad.

Al día siguiente, se publicaron informes que indicaban que el presidente había obtenido una orden de alejamiento contra Daniels en febrero pasado.

La orden, ganada en procedimientos privados de arbitraje, según los informes, le impidió a la actriz compartir "información confidencial" sobre su presunta relación.

La pasada semana, la vocera de la Casa Blanca reconoció de forma indirecta el litigio del presidente con Daniels.

"Este caso ya fue ganado en el arbitraje y cualquier cosa más allá de eso, lo remitiría a un abogado externo del presidente", aseguró la secretaria de prensa de Trump, Sarah Sanders.

CNN informó el jueves que el presidente Trump estaba molesto con la vocera por estos comentarios ya que fue la primera vez que alguien de la Casa Blanca reconocía que Trump estaba involucrado de algún modo con la actriz.

5. ¿Cuáles han sido las reacciones?

El congresista de Carolina del Sur Mark Sanford fue uno de los pocos republicanos en hablar del asunto y, en declaraciones a The Washington Post, calificó las noticias del escándolo como "profundamente preocupantes".

"Si fuera un presidente demócrata y se hubiera pagado el silencio en la campaña, ¿se celebrarían una serie de audiencias? Creo que probablemente hay muchos indicadores de que esto podría suceder", dijo.

Los demócratas Ted Lieu y Kathleen Rice, representantes de California y Nueva York, respectivamente, pidieron al FBI que investigue el pago de Cohen a Daniels.

Pero las implicaciones del caso llegaron también a las discusiones políticas a nivel estatal.

Cuando el representante republicano por Utah Mike Noel presentó un proyecto de ley para cambiar el nombre de una carretera a Donald J. Trump, el senador demócrata Jim Dabakis propuso cambiar el nombre de una carretera contigua al de Stormy Daniels.

6. ¿Qué podría significar para el presidente Trump?

Las acusaciones surgieron en un momento difícil para el gobierno de Trump.

Además de la investigación en curso sobre una posible colusión con Rusia, cada vez más miembros del personal de la Casa Blanca se han ido o están bajo escrutinio.

Para muchos expertos, lo último que la Casa Blanca necesita es otro escándalo al que responder y las acusaciones levantaron también el fantasma de un expresidente.

Y es que Bill Clinton enfrentó un juicio político después de mentir sobre su aventura con la becaria Monica Lewinsky.

Lanny Davis, un abogado que se desempeñó como asesor especial del presidente Clinton, acusó la semana pasada a los republicanos de "absoluta hipocresía" por la forma en que tratan a Trump en comparación con la forma en que trataron a Clinton.

No obstante, cuando ocurrió el escándalo asociado a Lewinsky está trabajaba en la Casa Blanca y Clinton ya ejercía de presidente.

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