Antes de convertirse en una de las figuras clave de la Casa Blanca, Steve Bannon ya llevaba varios años como "guía espiritual e ideológico" de Donald Trump.

Como impulsor del sitio web de derecha Breitbart News le ayudó al entonces candidato Trump a propagar su mensaje de "Estados Unidos primero", lo cual contribuyó a que ganara la presidencia.

La amistad entre ambos se inició cuando el empresario millonario neoyorquino comenzó a considerar con seriedad su candidatura para la presidencia.

Y cuando Trump lo logró, Bannon se convirtió en jefe de estrategia de la Casa Blanca y formó parte del importante Consejo de Seguridad Nacional.

Con ambas posiciones Bannon tuvo una enorme influencia que se vio reflejada en decisiones clave del nuevo presidente.

Este miércoles, sin embargo, toda esta autoridad quedó eliminada con la despectiva descripción que hizo Donald Trump de su antiguo asesor y confidente.

Trump dijo que Bannon había sido un "empleado de la Casa Blanca" que había tenido "muy poco que ver con nuestra histórica victoria".

El presidente también declaró que su exasesor era un "divulgador de noticias falsas" que rara vez estuvo presente en sus reuniones y que "ahora pretende que tuvo influencia para engañar a unos cuantos".

El libro

Las condenas de Trump hacia Bannon surgen después de que se divulgaran extractos de un nuevo libro del periodista Michael Wolff sobre el ascenso a la presidencia de Trump, "Fuego y Furia: Dentro de la Casa Blanca de Trump", que causaron la indignación del presidente.

Entre la información divulgada aparecen declaraciones de Bannon en las que critica duramente al entorno de Trump y califica de "traidor" y "antipatriota" el encuentro que el hijo del mandatario estadounidense y varios miembros de su campaña presidencial mantuvieron en junio de 2016 con un grupo ciudadanos rusos cercanos al Kremlin.

Tras las revelaciones, que describen al presidente como alguien que no estaba preparado para el cargo, Trump respondió que Bannon "se había vuelto loco" después de haber perdido su cargo en la Casa Blanca.

Los abogados del presidente afirman que Bannon violó los términos de su contrato de empleo al hablar con Wolff sobre Trump y su familia y emitieron una orden de suspensión y desistimiento contra el exasesor.

La influencia

Pocos creerán ahora las afirmaciones de Trump de que Bannon "no tuvo nada que ver" con el presidente o su presidencia.

Según el diario Washington Post, Bannon y Trump se conocieron en 2010 cuando los presentó David Bossie, presidente del grupo conservador Citizens United y subgerente de la campaña de Donald Trump en 2016.

"A pesar de que aparentemente Trump y Bannon no tenían mucho en común ?dice el diario? los dos se hicieron amigos por su rara característica de ser miembros de la élite costera (las clases profesionales y educadas que viven a lo largo de la costa este de EE.UU.), y a la vez presentarse a sí mismos como defensores de la pisoteada clase trabajadora".

"También compartían su indignación por la clase dirigente republicana", agrega.

Sam Nunberg, quien trabajó para Trump como asesor político y de campaña y fue despedido en 2015, le dijo al diario que él organizó numerosas llamadas telefónicas entre Bannon y Trump desde 2013.

"No tomó mucho tiempo para que los dos se convirtieran en almas gemelas ideológicas. En una época en que Trump era descartado como candidato fiable (para la presidencia), Bannon lo tomó con seriedad y lo promovió en su sitio web Breitbart News", afirmó Nunberg.

Así, Bannon comenzó alentando a Trump para que se postulara a la Casa Blanca, en los últimos meses de la carrera electoral se convirtió en su jefe de campaña y una vez que obtuvo el triunfo fue nombrado jefe de estrategia del presidente.

Como asesor de Trump, estuvo al frente de eventos como el retiro de Estados Unidos del Acuerdo de Cambio Climático de París, y de las polémicas órdenes ejecutivas para restringir la inmigración de países de mayoría musulmana.

La relación, sin embargo, se enfrió rápidamente. En abril, Bannon fue retirado de su cargo en el Consejo de Seguridad Nacional.

Y surgieron informes de una lucha de poder en la Casa Blanca entre el yerno y asesor de Trump, Jared Kushner, el director del Consejo de Economía Nacional, Gary Cohn, y Bannon.

Tal como señalan los corresponsales de la BBC, lo que en realidad llevó a su caída fue su discordia con el Asesor de Seguridad Nacional, H.R. McMaster, y su salida en la Casa Blanca llegó en agosto.

Bannon entonces regresó a Breitbart y prometió que seguiría ayudando al presidente y emprendería una guerra contra sus opositores.

"Nuevamente tengo en mis manos mis armas", declaró entonces. "Es Bannon el Bárbaro".

Inevitable

Tal como asegura el corresponsal de la BBC en Washington, Anthony Zurcher, el rompimiento de Bannon y Trump era "inevitable".

"La feroz respuesta del presidente a los comentarios de Bannon parece indicar que el puente entre el político y su guía espiritual ideológico ha quedado reducida a cenizas", afirma Zurcher.

"Independientemente del resultado de esta batalla, esto tiene que verse como un fracaso personal devastador para Bannon. Después de pasar años abogando por el populismo conservador anticlase dirigente, finalmente ocupó un lugar en las salas de poder. En 2017 dijo que esa meta era casi como 'la deconstrucción del Estado administrativo'".

"Ahora está nuevamente afuera, asediado por viejos antagonistas y exaliados".

Y el corresponsal concluye: "La discordia Bannon-Trump era inevitable y es incuestionable que será despiadada".

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