Calvin Coolidge fue el último presidente de Estados Unidos en poner pie en suelo cubano, en 1928. Al menos hasta este domingo, cuando Barack Obama -en un importante paso para el acercamiento entre ambos países- arribó al país junto a su esposa Michelle, sus dos hijas y su suegra.
Tras reuniones diplomáticas, Obama cenó junto a su familia en el centro de La Habana, en el típico restaurante paladar San Cristóbal, un lugar en el cual alguna vez el ex Presidente Sebastián Piñera y la actual Mandataria Michelle Bachelet compartieron un plato. Asimismo, cenaron allí figuras como Pepe Mujica y Mick Jagger.
“Fue un honor servirle al presidente de los Estados Unidos”, relató Reinier Mely -uno de los camareros que atendió a la familia Obama- al diario español El País.
Según el mesero, Obama pidió una carne a la plancha con vegetales a la parrilla, plato que no terminó. “Me confesó que estaba muy lleno”, recordó Mely, quien aseguró además que el mandatario estadounidense estaba “muy sonriente y saludando a todo el que se encontraba a su paso.
Por su parte, Michelle Obama comió una Tentación Habanera, es decir, “palillos de filete en salsa de vino tinto”, según explicó Jorge Alberto Cotilla, el otro camarero que los atendió.
Sasha, la menor de los Obama, pidió el mismo plato que su padre, mientras su hermana Malia comió una brocheta de cerdo.
Marian Shields Robinson, la suegra de Obama, también comió carne a la plancha y, junto a su hija Michelle, se tomó tres cuartos de botella de un vino pinot noir recomendado por el restaurante.
Barack Obama y sus hijas, en tanto, solo tomaron agua. “Yo le ofrecí vino al señor presidente y me respondió que mañana tenía que trabajar”, contó Mely.
Según los camareros, una cosa que llamó la atención de Obama fueron las fotos en la pared de los músicos Nat King Cole, Jay Z y Beyoncé Knowles. Los dos últimos visitaron el restaurante cuando viajaron a Cuba en 2013.
| Jay Z y Beyoncé en su visita a Cuba en 2013. |
Los postres de los Obama fueron pudín de la casa y flan con leche, además de algunas tazas de café.
Luego, según recuerdan los meseros, el presidente de Estados Unidos sacó “un bultico de dinero”, pagó y dejó una generosa propina.
Estas serán las actividades de Obama en Cuba