En un tribunal estadounidense, varios antiguos rehenes del grupo Estado Islámico (EI) observaron con insistencia el rostro de uno de los hombres acusados de torturarlos.

Hace diez días comenzó el juicio de El Shafee el Sheij: un hombre acusado de hacer parte de un trío de yihadistas particularmente crueles, apodado los "Beatles" por sus prisioneros debido a su acento británico.

Desde que iniciaron las audiencias, ocho de los exrehenes desfilaron ante los jurados. Todos detallaron los actos de tortura que sufrieron a mano de los crueles "Beatles" o sus lugares de detención, pero ninguno pudo describir a sus agresores con exactitud.

La razón es que los tres hombres llevaban siempre pasamontañas integrales, con simples orificios para los ojos, y guantes. "Siempre trataban de proteger sus identidades", indicó en el tribunal el fotógrafo francés Edouard Elias, secuestrado entre junio de 2013 y abril de 2014.

"Con los otros captores pude ver algunos detalles, pero no con ellos. Apenas distinguí una piel un poco más oscura...", agregó.

Los tres hombres instauraron además una "regla": en cuanto entraban "teníamos que arrodillarnos con el rostro volteado hacia la pared para no mirarlos", contó Federico Motka, un trabajador humanitario que pasó 14 meses entre sus manos.

Las mujeres debían "cubrir su rostro" con un pañuelo, explicó Frida Saide, exempleada de Médicos Sin Fronteras, detenida durante tres meses.

"Seguramente pensaban que así evitarían ser perseguidos", comentó el exreportero francés Nicolas Henin. "Quizá no fue una tan buena idea..."

"Un equipo"

Incluso sin haberlos visto, los prisioneros los reconocieron fácilmente. "Tenían una forma particular de golpear a nuestras puertas", "podíamos sentirlos", señaló Elias. También estaban "mejor equipados" que los guardias locales, con sus pistolas y botas.

Pero en un proceso en que el acusado tiene derecho a guardar silencio y llevar ropa civil, los recuerdos pierden peso.

Y en un hecho inusual, los fiscales nunca preguntaron a los exrehenes si reconocían al hombre de largos lentes sentado ante ellos.

Al finalizar el testimonio de Federico Motka, el juez T.S. Ellis sugirió plantearle la pregunta. Pero el fiscal Dennis Fitzpatrick admitió no estar "seguro" de que su testigo estuviera en capacidad de responder.

Ante este problema de identificación, los abogados de la defensa defienden que su cliente si fue yihadista del EI, pero que no era uno de los "Beatles".

La defensa será sin embargo ardua. El Shafee el Sheij fue arrestado en 2018 por las fuerzas kurdas sirias con Alexanda Kotey, quien se declaró en septiembre de 2020 culpable de haber sido parte de los "Beatles".

Además, dio varias entrevistas tras su arresto y admitió haber estado "en contacto" con varios rehenes occidentales. Sin embargo, buscó descargar la responsabilidad en otro miembro del trío: Mohammed Emwazi, llamado "Yihadi John", muerto en un ataque con drones en 2015.

Nuevamente, el argumento es endeble. Todos los antiguos rehenes insistieron en el tribunal en el hecho de quelos "Beatles" formaban un trío solidario. "Se conocían, formaban un equipo", dijo Elias. "Parecían buenos amigos", agregó Frida Saide.

Y todos participaban cuando se trataba de torturar a los prisioneros, aunque, según Motka, "George prefería boxear, John dar patadas y Ringo estaba más metido en el combate cuerpo a cuerpo".

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