El líder de Corea del Norte, Kim Jong-Un, pidió -entre lágrimas- que las mujeres tengan más hijos para frenar la caída de la natalidad en el país, y así, fortalecer el "poder nacional".

Según recoge Perfil, el hecho ocurrió el pasado domingo en una Conferencia de Madres, donde incentivó a las mujeres a "sumarse a las tareas sociales" del país.

Asimismo, aplaudió la "abnegada devoción" con que las madres norcoreanas alimentaron "no solo a sus propias familias, sino también el futuro de la patria", añadiendo que gracias a su labor, se pudo crear "una gran familia socialista".

El líder norcoreano confió también en que las mujeres se sumen también a todo tipo de retos, que van desde "criar hijos para que puedan seguir con la revolución" a "eliminar las prácticas no socialistas".

Asimismo, pidió "detener la disminución de las tasas de natalidad y proporcionar un buen cuidado y educación infantil".

"Estas tareas incluyen educar a sus hijos para que lleven adelante con firmeza nuestra revolución, eliminar las prácticas no socialistas que han aumentado recientemente, promover la armonía familiar y la unidad social, establecer una forma sana de vida cultural y moral, hacer que las virtudes y rasgos comunistas de ayudarse y guiarse unos a otros prevalezcan sobre nuestra sociedad, detener la caída de la tasa de natalidad y cuidar bien de los niños y educarlos eficazmente", afirmó.

Mira el registro a continuación:

Publicidad