Una ex trabajadora del Congreso de Estados Unidos enfrenta serias acusaciones tras ser imputada por supuestamente haber simulado un violento ataque en un parque de Nueva Jersey. La denuncia penal sostiene que Natalie Greene, de 26 años, habría pagado a un artista de modificación corporal para producirle cicatrices y luego denunciar un asalto motivado políticamente ocurrido en julio.
La Oficina del Fiscal Federal para el Distrito de Nueva Jersey informó que la residente de Ocean City fue acusada de conspiración para transmitir declaraciones falsas y de entregar información engañosa a agentes federales.
Greene afirmó que la supuesta agresión estaba vinculada a su labor para el representante republicano de Nueva Jersey, Jefferson Van Drew. Aunque el congresista no aparece mencionado en la acusación presentada por las autoridades, su oficina sí confirmó que ella había sido parte de su equipo en el pasado.
Su abogado, Louis Barbone, defendió la presunción de inocencia de su representada. “A los 26 años, mi clienta sirvió a su comunidad trabajando a tiempo completo para ayudar con lealtad y fidelidad a los electores del congresista. Lo hizo mientras cursaba sus estudios a tiempo completo. Según la ley, se presume su inocencia y se reserva todas sus defensas para presentarlas ante un tribunal”, señaló a ABC News.
Exempleada republicana habría pagado para fingir agresión
Los fiscales alegan que Greene y un presunto cómplice llamaron al 911 el 23 de julio, asegurando que tres hombres armados los habían atacado en un parque estatal de Egg Harbor Township. Cuando la policía llegó al lugar, encontraron a Greene en una zona boscosa, atada con amarras y con cortes en la cabeza y el pecho. En su abdomen, según el expediente, se hallaron escritos un insulto sexual con referencia a Trump y una frase que describía a su antiguo empleador como “racista”.
Sin embargo, la investigación tomó un giro drástico. “La investigación reveló que, de hecho, Greene no había sido atacada a punta de pistola por tres hombres el 23 de julio. En cambio, Greene había pagado a un artista especializado en modificación corporal y escarificación para que le hiciera deliberadamente las laceraciones en la cara, el cuello, la parte superior del pecho y el hombro, basándose en un patrón que ella le había proporcionado previamente”, indicó la fiscalía en un comunicado.
Según la denuncia, en el vehículo de Greene se encontraron amarras que coincidían con las utilizadas para atarla. También se habría detectado una búsqueda realizada por su presunto cómplice sobre "amarras de plástico cerca de mí”. Además, Greene habría dicho a un agente del FBI que estaba recibiendo mensajes amenazantes en su trabajo, pero el análisis de su teléfono mostró conversaciones con el artista de escarificación en Pensilvania, quien entregó el recibo por un servicio de 500 dólares.
Documentos judiciales también señalan que su teléfono contenía un perfil de Reddit que seguía páginas dedicadas a “modificaciones corporales” y “escarificación”.
Greene quedó en libertad bajo una fianza de 200.000 dólares tras comparecer ante un juez. De ser declarada culpable, podría enfrentar hasta 10 años de prisión y multas por un total de 500.000 dólares.