A partir del 13 de octubre se encuentra en exhibición la exposición “The Mystery Man”, en la cual se muestra una escultura hiperrealista del cuerpo de Jesús. Esta replica fue creada por silicona y látex y cabello humano.
La escultura pesa 75 kilos y mide 1.78 metros de altura. El director artístico de la exhibición, Álvaro Blanco, analizó por años la figura de Jesucristo para hacer la réplica, que tiene como principal atractivo la reproducción del cuerpo de la Sábana Santa de Turín. Se trata de una recreación volumétrica del cuerpo crucificado que pudo envolver la tela que se conserva en la catedral de Turín.
La figura de Jesús se encuentra encorvadaen “rigor mortis” con los hombros magullados por llevar la cruz, tesgarros por los azotes y la cabeza con heridas por la corona de espinas. Además, tiene en su costado la perforación de la lanza y sus manos y pies tiene los orificios de los clavos.
Blanco aseguró al Clarín que la estatua es un cuerpo “en calidad humana de Jesús. Los pintores han tratado e representar su imagen y hoy por primer vez, vamos a ver ese cuerpo lo más fidedigno y carente de todo movimiento artístico, de una calidad hiperrealista”.