Esta semana la empresa constructora Claro, Vicuña, Valenzuela (CVV) anunció que solicitará su quiebra, lo que llevará a que desmovilizará más de 30 obras y que unas 2.500 personas quedarán sin trabajo.
Algunas de las obras que se verían paralizadas por esta situación están en la Región del Biobío, siendo una de ellas el Puente Chacabuco que une Concepción con San Pedro. “Siempre una quiebra de una empresa es negativo para la economía de una región, sobretodo en una empresa en el sector de la construcción, que es un sector que se encadena fuertemente con otras actividades económicas”, aseguró al respecto en conversación con T13 Javier Sepúlveda, seremi de Economía del Biobío.
En total, son siete las obras que se estaban ejecutando en la Región del Biobío: Conexión del Puente Bicentenario con avenida Chacabuco, además de la construcción del puente Arturo Prat en Curanilahue, el tercer tramo del Eje Colón Talcahuano, proyectos habitacionales en San Pedro de la Paz y Hualpén, además de obras en el marco del proyecto Mapa de Arauco.
“Por lo tanto, la quiebra de una empresa como esta que tiene grandes proyectos emblemáticos como estos en la ciudad y en la región del Biobío, generarían eventualmente un freno en la actividad y la producción económica”, agregó.
Sepúlveda fue consultado por la pérdida de empleos que generaría esto: “Por cada trabajo directo que genera un sector como la construcción, hay al menos dos a tres trabajos indirectos asociados, por lo tanto, si hablamos a nivel nacional de 2,500 empleos directos, estaríamos hablando que estamos pasados los 5,100 empleos indirectos, siempre y cuando no se retomen con rapidez las obras”.
Sobre las medidas que se están tomando para hacer frente a esta posible deceleración económica comentó que, “el Ministro de Economía ya lo ha señalado hace poco, nosotros estamos trabajando en varias aristas para incentivar la inversión, por ejemplo, para incentivar la inversión en el sector de la construcción, para buscar cuales son las trabas y además, aplicar medidas de incentivo tributario para incentivar la inversión”.