En medio de la conmoción que vive la comuna de Chiguayante, en la región del Biobío, han surgido detalles inéditos sobre el extraño comportamiento que mostró la mujer acusada de un doble parricidio segundos antes de ser detenida.
La mujer, de 64 años, fue captada en un local comercial de Coihueco, en la región del Ñuble, donde llamó la atención de los dueños por su actitud y la insólita instrucción que le dio a la encargada del negocio, luego de pedir un favor.
La dueña relató lo sucedido: "Salí a atenderla y ella me dice que me quería pedir un favor (...) Dijo que necesitaba un teléfono para hacer una llamada (...) Ahí me dio el número, me lo dio tres veces pero se equivocó, porque se notaba que estaba nerviosa. Le pregunté a quién necesitaba que llamara y me dijo que a su hermano".
"Ahí me comencé a asustar": Dueña de negocio revela insólita instrucción que le dio mujer acusada de parricidio
Lo que más desconcertó a la propietaria fue que la mujer no habló directamente con su hermano, sino que le dio una instrucción particular a ella: "Me dijo 'pregúntele si quiere saber de mí'".
Al contactar al hermano, la respuesta de él despertó rápidamente las sospechas de la dueña del local. Ella contó: "Le digo, sabe que está su hermana en el local y pregunta si quiere saber de ella. Y él me dice 'sí sí por favor, dígame dónde está'. Yo le dije dónde estábamos y él me pregunta, ¿puedo seguir teniendo comunicación con usted mientras yo voy viajando a buscar a mi hermana? y yo le dije sí".
Ante este diálogo, la comerciante agregó: "Le pregunté a él, ¿de dónde es usted? y me dijo de Concepción, entonces pensé que podía ser a la señora que estaban buscando. Le ofrecí que esperara afuera, porque ella andaba con las manos en los bolsillos y ahí me comencé a asustar, pensé que podía tener un arma o un cuchillo".
"A mi me dio hasta ternura": Así actuó la mujer acusada de doble parricidio en negocio donde fue detenida
De acuerdo con el testimonio de los dueños del negocio, la mujer se reía y se mostraba tranquila, aunque mantuvo las manos firmemente apoyadas sobre su cartera durante toda su estadía. Más tarde, cuando fue detenida, ellos comprendieron el motivo detrás de esa actitud.
En ese contexto, la dueña detalló: "No se veía nerviosa, se veía muy tranquila, se reía, a mí me dio hasta ternura. Me dio las gracias por prestarle el teléfono. Cuando vino a pedirme el teléfono me di cuenta que estaba perdida, no sabía dónde estaba. Ella andaba a pie, no me pidió comida ni nada, solo esperaba que alguien la fuera a buscar. Iba con una chaqueta y un poco agachada para que nadie la viera".
Por su parte, el dueño del local recordó: "Tengo un video donde se le ve riéndose, pero todo el rato con las manos en la cartera, ahí (tenía guardado) el revólver".
"Cuando la detuvieron, le sacaron el arma, la dejaron en una mesa y después nos llamaron a declarar, y en el retén no sabían que la señora había hecho eso, no tenían idea de nada. Después llegaron unos Carabineros de Chillán Viejo y tampoco sabían nada", concluyó el propietario del local.