La preocupación de una familia chilena que vive en Osorno escaló a nivel nacional luego de que una de sus hijas, quien es una reconocida influencer, denunciara públicamente que su hermana de 16 años está siendo perseguida por un peligroso acosador.
Belén Castillo relató que el comportamiento del sujeto se ha vuelto cada vez más intimidante y que su familia teme por la seguridad de la menor, quien también es creadora de contenido.
El acosador incluso ha intentado suplantar la identidad de los padres de la menor para retirarla del colegio, además de apostarse afuera de su casa, enviarle regalos sin consentimiento, crearse decenas perfiles falsos, mientras su obsesión por acercarse a la menor cada vez se agrava más.
La hermana mayor de la víctima describió que la adolescente ahora vive prácticamente encerrada en su casa por miedo a que el sujeto cumpla sus amenazas.
“Yo creo que les va a tocar estar todos los días con ella pa’ arriba y pa’ abajo. Ayer no pude porque su papá se puso agresivo. Igual en cualquier momento la veo por ahí sola”, les dijo el acosador en uno de los audios que envió.
Repetía la idea de “hacer pagar” a su víctima: Acosador ya había generado alarma en Colombia
En la denuncia que publicó la influencer chilena, ella asegura que el sujeto tiene antecedentes similares en Colombia, y que su nombre es César Alejandro Vivas Becerra.
Y pese a que esa identidad no ha sido confirmada oficialmente por las autoridades chilenas, lo que Belén Castillo describe, coincide con un reportaje publicado en 2023 por el medio colombiano El Espectador.
En aquel entonces, dicho medio expuso la historia de Lina Rezk Rojas, una ingeniera biomédica que se vio obligada a transformar por completo su vida tras el acoso sostenido de César Alejandro Vivas Becerra.
De acuerdo con esos antecedentes publicados, el hostigamiento habría comenzado en mayo de 2022, cuando el acosador trabajaba como vigilante en el edificio donde ella se desempeñaba. Primero aparecieron flores, luego chocolates, más tarde mensajes y preguntas incómodas sobre su vida personal.
Según el informe, Lina comenzó a vivir prácticamente encerrada. Renunció a su trabajo, eliminó sus redes sociales y cambió repetidamente su número de teléfono. Su rutina diaria estaba atravesada por el miedo a que el hombre cumpliera sus amenazas, lo mismo que hoy vive la menor de 16 años.
El medio reportó que incluso tras ser retirado de su puesto, él seguía buscándola en distintos horarios. De hecho, en una ocasión, increpó a la víctima luego de que la viera saludarse con un amigo: "¿Son amigos o novios?", le preguntó al encararla.
Los aterradores mensajes que acosador enviaba a su víctima en Colombia: "Voy a ser una pesadilla en tu vida"
El Espectador detalló además que el acosador pasó a emplear tácticas mucho más graves: intentos de hackeo, suplantación digital y amenazas directas.
Usando decenas de cuentas falsas, habría enviado frases como “vas a ser mía”, “voy a ser una pesadilla en tu vida”, “no la voy a dejar en paz” o “me va a hacer ir hasta su casa”. En otros mensajes citados textualmente por el medio, también se leían advertencias como, "voy a luchar contra quien sea. El resultado me da igual", “Yo la tengo súper stalkeada por todos lados. Sé lo que hace, lo que no hace y todo” o “Ella me rebajó a nada y yo voy a hacer lo mismo”.
Todo esto, pese a que la víctima no tuvo nunca una relación con el sujeto. Según el reporte periodístico, las amenazas también se extendieron al círculo cercano de la víctima.
“Conmigo Lina nunca va a tener paz. Ella se lo buscó y ahora que se aguante”, “Ella habla conmigo por las buenas o habla conmigo por las malas”, “Ella se está cavando su propia tumba”, “Sé que ella no me pertenece, pero quiero que no le pertenezca a absolutamente a nadie. Y la quiero ver sola siempre, o al menos hasta que yo esté. Sé que suena un poco descabellado, pero eso es lo que quiero para estar tranquilo”, eran parte de otros mensajes que enviaba el acosador, acompañados de decenas de llamadas perdidas a los amigos de Lina.
Entre otros escritos que el acosador enviaba, culpaba a la víctima: "Ella es la única que puede quitarme este sentimiento de odio y por eso necesito estar con ella (...) Yo más de una vez le he dicho, 'usted es la única que me puede calmar esta ira que tengo, ¿por qué no me correspondió?, ¿por qué no me dejó clara las cosas?".
Familiares del acosador decidieron hablar en anónimo con el medio, y mencionaron un episodio similar ocurrido diez años antes con otra joven, el cual, con el paso del tiempo, comenzaron a reconocer como un patrón de acoso.
Su salida de Colombia y llegada a Chile
De acuerdo con lo consignado , el hombre habría abandonado Colombia hacia finales de 2022, pasando por Perú antes de instalarse en Chile, aunque su ubicación exacta ya entonces era incierta. Una fuente consultada por el diario colombiano expresaba preocupación, señalando que él repetía la idea de “hacer pagar” a su víctima.
Incluso su situación residencial presentaba inconsistencias: la dirección que entregó a una empresa en la que buscó empleo no coincidía con ningún domicilio real, lo que llevó al medio a constatar que tampoco la segunda dirección entregada por él correspondía a su residencia.