Martes 8 de febrero y la Plaza de Puerto Montt se llena de personas. La mayoría están vestidos con poleras blancas y pancartas que exigen justicia. Se trata de familiares, amigos y conocidos de Francisca Rojas, una sicóloga de 24 años que murió el 8 de febrero de 2021 tras ser atropellada por un camión en la ciclovía del sector Senda Central de la comuna de Puerto Montt.

El caso rompió el día a día de la comuna, que estaba en cuarentena en medio de la segunda ola del COVID-19. La joven, madre de un niño de 3 años, llevaba solo cuatro días en su primer trabajo. Además, el conductor de la máquina, un hombre de 32 años que no portaba su salvoconducto para circular en la vía pública, lo hacía con 2,14 gramos de alcohol en la sangre: conducía en estado de ebriedad.

A ya más de 365 días de su muerte, la familia de Francisca ha manifestado públicamente su molestia con el avance del caso, ya que el imputado, quien fue formalizado por manejo en estado de ebriedad con resultado de muerte, solo alcanzó a estar dos días en prisión preventiva. Desde entonces, cumple arresto domiciliario.

Ahora, la familia y su abogado esperan que luego que se decretase el fin de la investigación, el pasado 31 de enero, la Fiscalía haga la acusación formal contra el imputado.

Iniciativa para elevar penas

“Es un caso que remeció a Puerto Montt”, aseguró el diputado (PL), Alejandro Bernales. El parlamentario tomó contacto con la familia en una de las manifestaciones que realizaron para visibilizar el caso.

“Lo que pasa con el caso de Francisca es que hay un tema que está específicamente relacionado con los ciclistas. En Chile hay más de 80 ciclistas fallecidos el año pasado por conductores irresponsables, pero también lo que ha abierto el caso de Francisca, y es una de las cosas que preocupa a la familia, es que la persona que la atropelló, que iba en estado ebriedad, hoy está en su domicilio. Y es algo que tenemos que revisar”, explicó Bernales.

En ese sentido, el legislador explicó que en este tema existe un espacio para que pueda presentar un proyecto que más allá de los ciclistas, aumenten las penas para personas que provoquen este tipo de accidentes después de haber consumido alcohol.

“Ahí hay un espacio para que se presente un proyecto que nosotros presentemos el próximo año. Que incluya a los ciclistas, pero que también incluya a otros tipos de casos: conductores que atropellan a peatones en estado de ebriedad, que chocan a otros vehículos y muchas veces las familias quedan el dolor de que no se hace justicia”, aseguró.

Sobre esta iniciativa, Bernales asegura que antes de la presentación, habrá una conversación con las distintas bancadas para buscar el mayor apoyo posible. No obstante, recalcó la importancia de discutir inmediatamente el fondo de cómo sería esta iniciativa. “Lo que dice la comparación legistativa y experiencia es que a pesar de que puedas aumentar las multas, van a existir este tipo de casos, y esto tiene que ver con un tipo de educación vial que hay que fomentar”, aseveró.

En este sentido, ya existe una iniciativa que se tramita aún en el Congreso. Corresponde a una moción que modifica artículos del Código Penal y eleva las penas para quienes en un vehículo motorizado dañen o lesionen a quien se traslade en bicicleta u otro ciclo.

Tras la luz verde que le dio en octubre pasado la Cámara de Diputados a este proyecto, Bernales tomó la palabra y recordó a Francisca.

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Familia de Francisca apoya la futura iniciativa

“Como familia vemos que hay una oportunidad de actualizar (la ley)”, aseguró Maximiliano Rojas, padre de Francisca sobre la posibilidad de buscar cambios en las leyes que permitan mayores sanciones a estos delitos.

Aún así, a un año de la muerte de su hija, Rojas ve difícil que el imputado cumpla una pena de cárcel efectiva: “La justicia es garantista y beneficia al infractor. El tipo que mató a mi hija ha estado siempre en su casa… te das cuenta que la justicia es realmente deficiente”, sentenció.

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