El fiscal regional de Magallanes, Cristián Crisosto, se refirió al fin del caso del influencer estadounidense que aterrizó sin autorización en la Antártica chilena y aseguró que “todo indica que la única forma de que ese avión va a poder salir de la Antártica es desguazado“.
Se trata de Ethan Guo (19), que está realizando un viaje en solitario alrededor del mundo en su avioneta Cessna 128Q para recaudar un millón de dólares para la investigación en contra del cáncer infantil. El joven piloto a las 05:30 de la madrugada del 28 de junio despegó desde el Aeropuerto Carlos Ibáñez con un plan que contemplaba únicamente sobrevolar la capital magallánica.
En el comunicado de la DGAC, el organismo señaló que tras despegar, modificó “su plan de vuelo sin notificar a los respectivos centros de control de tránsito aéreo del aeropuerto. Este cambio no autorizado implicó una transgresión del itinerario inicial, culminando con el aterrizaje de la aeronave en el aeródromo Teniente Marsh de la Antártica”.
El pasado 11 de julio el Juzgado de Garantía de Punta Arenas aprobó la suspensión condicional de procedimiento propuesto por el Ministerio Público y aprobó la salida alternativa bajo las condiciones de donar la suma de 30 mil dólares -casi 30 millones de pesos chilenos- a Fundación Nuestros Hijos en un plazo no mayor de treinta días. Además, se le prohibió el ingreso del influencer a territorio nacional por un plazo de tres años.
En julio, La Prensa Austral había reportado que era probable que Ethan Guo no pudiera salir de la Antártica debido a las condiciones climáticas del invierno y que, por tratados medioambientales a los que Chile está suscrito, el combustible que utiliza su aeronave no estaría disponible en ese continente. Por lo anterior, podría abandonar el país solo mediante vuelos comerciales o en barcos militares.
Según Jaime Barrientos, abogado del influencer estadounidense, el joven de 19 años está pasando por un mal estado de salud producto de los hechos. "El estrés de esta situación ha provocado un grave deterioro de su salud, incluyendo una pérdida de 20 kilos de peso y un diagnóstico de pericarditis (inflamación de la membrana externa del corazón). Aunque agradece los esfuerzos para conseguirle un pasaje en barco, se muestra frustrado porque no existe un plan para su avión, lo que le impide continuar con su misión benéfica de recaudar fondos para St. Jude”, aseguró.
La posible salida del influencer de la Antártica podría ser sin su avión
En entrevista con El Mercurio, el fiscal Crisosto contó que “el avión no es parte de la suspensión condicional. ¿Qué hará el señor Guo con su avión y cómo lo saca de allá? Es un asunto estrictamente personal de él. Ahora, los requisitos aeronáuticos para volar a la Antártica y despegar de ella de toda la norma aeronáutica, internacional, nacional y lo que deriva del Tratado Antártico, hacen bien difícil, si no imposible, que esa nave pueda ser sacada volando desde ese continente”.
“Todo indica que la única forma de que ese avión va a poder salir de la Antártica es desguazado”, sentenció.
El mismo medio consigna que la avioneta de Guo no cuenta con sistemas de antihielo y tendría vencidas las balsas y chalecos salvavidas. “La aeronave no cumple con ningún requisito para poder volar desde la Antártica. Pero las condiciones de la suspensión del procedimiento dicen relación con la llegada del señor Guo a territorio chileno continental. Y eso él perfectamente lo puede hacer en un barco militar o a través de un vuelo comercial”, sostuvo el fiscal.
Por último, Crisosto se refirió a la versión del influencer de que una vez despegó de Punta Arenas tuvo problemas que lo obligaron a volar hasta la Antártica (más de 1000 kilómetros): “De norte a sur, están los aeropuertos de Porvenir, Cerro Sombrero, Pampa Guanaco, Río Grande y Ushuaia en Argentina, además del de Puerto Williams. Es decir, tuvo seis aeropuertos en los que aterrizar; por lo tanto, lo que él dice en este sentido no tiene ningún asidero”.
