La versión 2017 del festival de Dichato correría peligro por la deficiente organización del evento, la que tiene una parrilla programática de última hora y una negociación pendiente con los canales de televisión para que sea transmitido como lo fue por años, además del escaso presupuesto del que cuenta por parte del Gobierno, quién financia la iniciativa.

Cabe recordar que este festival se llevó a cabo tras el terremoto de 2010 con el propósito de ayudar a la ciudad a levantar la actividad económica que se viera afectada tras ser víctimas del tsunami.

Según consigna Biobio, el concejal y encargado del área cultural José Fuentealba, detalló que en todo el año no se ha tratado el tema en los concejos municipales y que él considera que desde que se acaba un festival, de inmediato debería constituirse el otro festival: “Debe haber una comisión permanente”, señaló.

Al respecto de la relación que conlleva la organización del evento con el año electoral que estamos viviendo, la presidenta de la Cámara de Comercio del Balneario, Cristal Ortega, dijo que el festival “es muy importante por el turismo que llega acá a Dichato”. Sin embargo, no se puede finiquitar nada aún, porque las conversaciones dependen de las autoridades que este año se someten a elección.

En cuanto al financiamiento, la alcaldesa de Tomé, Ivonne Rivas, aseguró que habrá festival y que en la parte económica está el compromiso que hizo la presidenta Michelle Bachelet, en cuanto a financiar la iniciativa.

Esta ayuda por parte del Gobierno, para el ex edil, Eduardo Aguilera, es una forma de apoyar con claros fines electorales. En una nueva conversación con biobio comentó que “fue como tirarle un salvavidas a la administración actual”, porque si no iba a ser un castigo político y electoral muy fuerte para la alcaldesa.

Por otra parte, el intendente del Bío Bío, Rodrigo Díaz, declaró que la anterior gestión privada fue “abusiva”. Por lo que ahora, lo que se hace es colaborar para ayudar con el fin que es dinamizar la actividad económica. 

Publicidad