Un caso de presunta negligencia médica fue denunciado por la familia de una bebé que falleció poco después de nacer en el Hospital de Puerto Montt, región de Los Lagos. A raíz de lo ocurrido, se presentó una querella criminal por varios delitos que, según los denunciantes, estarían relacionados con el actuar del equipo médico.
Los hechos se remontan al pasado viernes 4 de abril, cuando Carmen Gloria Chacón ingresó al centro hospitalario alrededor de las 11:00 horas para dar a luz a su hija Amanda, en un parto que ocurrió en la semana 22 de gestación. De acuerdo con el testimonio que presentaron en la acción judicial, fue su hermana Pamela Chacón quien la acompañó durante el procedimiento.
Según detalló Pamela en conversación con el medio BiobíoChile, Amanda nació a las 11:40 horas y fue entregada a ella debido a que la madre permanecía en cirugía. En ese momento, comenzó una angustiante situación donde la familia de la madre y de la bebé pedía que la lactante fuera ingresada en una incubadora, dado su estado prematuro. No obstante, Pamela Chacón asegura que dicha solicitud fue ignorada.
“Hasta las 13:07 la Amanda estuvo con vida. Les supliqué, le pedí a la matrona que estaba conmigo que la pusieran en incubadora, porque Amanda sí quería vivir, pero ellos le negaron eso. Ahí me dejaron hablando sola y me dejaron con Amanda. Falleció en mis brazos“, narró la tía con un profundo pesar.
La madre de la menor, Carmen Gloria, coincidió con esa versión de los hechos, expresando, “mi hija nació viva, le pedimos que la pusieran en incubadora y dijeron que no, porque simplemente ellos dijeron que no era para ponerla en incubadora. Les decíamos que por qué no si ella estaba viva (...) si la hubiesen puesto en la incubadora, yo sé que mi hija habría podido vivir, pero se la negaron”.
Según lo que recoge el medio citado, debido a estos antecedentes, se interpuso una querella dirigida contra la obstetra Patricia Álvarez —y contra quienes pudieran compartir responsabilidad— por los presuntos delitos de homicidio frustrado, homicidio consumado, negligencia médica con resultado de muerte y falsificación de instrumento público.
Cuestionamientos a la versión oficial y discrepancias en la documentación
La abogada que representa a la familia, Orieta Llauca, explicó que además de la omisión en los cuidados inmediatos a la bebé, existen serias inconsistencias en la información oficial que respalda la versión del hospital.
“La niña nació por parto normal, y nació viva, y así se mantuvo por más de una hora. La matrona se negó a poner en incubadora a la bebé, pues nació producto de un parto prematuro extremo”, declaró la jurista.
Llauca fue más allá, señalando que en su evaluación, el accionar del personal médico podría configurar un delito más grave: “al momento de negar la incubadora, sólo porque a juicio de la matrona, ella no viviría, sin ni siquiera intentar ayudar a la niña para que luche por su vida, se comete el delito de homicidio calificado, dado que existía absoluta conciencia en la matrona que al no poner a la niña en incubadora, la bebé fallecería”.
De la misma forma, la profesional acusó manipulación en los documentos médicos y en el informe enviado a la Corte de Apelaciones de Puerto Montt, indicando que “falsearon información respecto de la condición de la niña y su hora de fallecimiento, por cuánto Amanda Esperanza no era un feto expulsado por la madre, cómo pretende hacer creer el hospital, sino que al nacer viva Amanda Esperanza es una persona, y además falsearon el tiempo de sobrevivencia de Amanda. Indican 40 minutos, cuando en realidad fue una hora y veintisiete minutos”.
Respuesta del Hospital de Puerto Montt ante la denuncia por la muerte de la bebé
Consultado sobre el caso, el Hospital Regional de Puerto Montt expresó su pesar por el resultado del embarazo y manifestó disposición a atender a la madre si esta requiere resolver dudas sobre lo ocurrido.
No obstante, desde la institución sostuvieron que "en el Hospital de Puerto Montt la paciente ingresó a la Urgencia Maternal y fue atendida inmediatamente por nuestros equipos. En esta unidad se le realizaron exámenes, los cuales fueron analizados por un comité de médicos que concluyó que, lamentablemente, la paciente presentaba una infección uterina y ausencia de líquido amniótico, siendo inviable la sobrevida del feto. Ante este cuadro lo que correspondía era practicarle un aborto terapéutico, procedimiento que no se realizó debido a que la paciente presentó un aborto espontáneo".
Junto coon esto, agregaron, "entendiendo el profundo dolor que este hecho provocó en la paciente, el equipo médico se abocó a seguir el protocolo indicado para estos casos y a darle el espacio de apego contemplado en los protocolos".
Por último, concluyeron, "una vez más expresamos nuestro profundo pesar a la paciente y a su familia y ponemos a su disposición ayuda profesional para apoyarla en este difícil proceso. Para el Hospital de Puerto Montt y sus equipos de salud, el bienestar de sus pacientes siempre es una prioridad".
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