Una mujer de 34 años presentó una serie de reclamos formales al Sistema de Atención al Usuario (OIRS) del Hospital Carlos Van Buren de Valparaíso, acusando malos tratos, falta de acompañamiento médico y desinformación respecto al procedimiento quirúrgico de emergencia durante la cesárea en la que dio a luz a su primera hija, actualmente hospitalizada por parto prematuro.

Bárbara Núñez, la paciente afectada, llegó por sus propios medios al recinto el pasado 22 de octubre, pues la ambulancia del servicio asistencial de su sector no logró dar con su dirección, según ella misma relató al diario La Estrella de Valparaíso.

Tras minutos de espera e incertidumbre, ingresó a la Unidad de Emergencia con dificultades para caminar y evidentes manifestaciones de dolor.

Madre denuncia traumática cesárea en Hospital Carlos Van Buren

"No me ofrecieron ayuda. Tampoco me otorgaron una silla de ruedas para poder ingresar de forma rápida y expedita al hospital e, incluso, le negaron la entrada a mi pareja, Nicolás, y a mi mamá una vez dentro del cubículo. Me sentía sola", expresó la afectada al periódico.

Pero los inconvenientes continuaron tras confirmarse la gravedad de su estado. La mujer asegura que el procedimiento se llevó a cabo sin que el equipo médico se identificara ni le explicara las etapas de la cirugía. Además, detalló, al momento de ser inyectada con anestesia epidural para bloquear el dolor, ésta no tuvo efecto y continuó con las molestias en medio de la operación, algo que le generó indignación.

"Al entrar de emergencia al pabellón me colocaron la anestesia epidural y no esperaron a que hiciera efecto, por lo que sentí la incisión en la piel y cómo sacaron a mi niña entre el dolor y la angustia, porque ni siquiera la escuché llorar. A un costado de la cicatriz de mi vientre tengo una quemadura hecha en algún momento de la intervención, pues no la tenía antes", relató.

La mujer también lamentó que ni siquiera tuvo la oportunidad de conocer el rostro de su hija.

"Lo que me hicieron no tiene nombre. Es un momento muy difícil para mí. No conozco a mi bebé porque no me dejaron verla. La tomaron en brazos y se la llevaron", afirmó.

Hoy la bebé se encuentra en la Clínica Bupa Reñaca, con diagnóstico reservado, pues el Hospital Carlos Van Buren no contaba con camas en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) para su recuperación. Tras cinco días desde su nacimiento, su madre todavía no puede verla.

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