El presidente de la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC), Alfonso Swett, es uno de los personajes públicos que más ha comentado la actual situación del país, tras el estallido social que inició en octubre. 

En entrevista con Radio Cooperativa, el líder gremial habló sobre los temas que más han complicado a la clase empresarial, como lo son las colusiones y los abusos. 

"Yo creo que ya es hora que los abusos de cuello y corbata tengan penas de cárcel duras y efectivas. A la ciudadanía le cuesta entender que una persona que vende unos CDs en la calle termine siendo quemada en una cárcel, muriendo, y resulta que delitos de cuello y corbata no terminan en la cárcel", dijo Swett, haciendo referencia a Bastián Arriagada, quien cumplía una pena de 61 días cuando murió en el trágico incendio de la cárcel de San Miguel en 2010, junto a otros 80 reclusos. 

El mandamás de la CPC añadió que "eso nos hace muy mal a nosotros como sector, porque no todos los empresarios son así, pero lamentablemente termina generalizándose, por lo tanto, para nosotros es tremendamente importante una ley muy dura contra los abusos de cuello y corbata".

Además, el representante de los grandes empresarios realizó una autocrítica por el rol de estos en la actual crisis. 

"Un mea culpa que me duele mucho en lo personal, de haber visto que estos temas eran importantes y no haberles dado la urgencia suficiente y eso es algo que a mí en lo personal me duele mucho", comentó. 

"El trabajo no es solamente un salario, el trabajo tiene que ver con dignidad, con entender que detrás hay una persona que requiere una digni

Publicidad