Varios han sido los guiños que ha tenido el PRO con el Partido Comunista en la antesala de las elecciones parlamentarias y presidenciales y todo parece indicar que habrá un posible acercamiento entre ambas colectividades.

Esta aproximación fue confirmada por el líder progresista en El Mercurio. Marco Enríquez-Ominami indicó que su partido está trabajando con el PC y "avanzando en un esfuerzo conjunto en materia parlamentaria y en el plano programático".

El candidato considera que los comunistas son "uno de los pocos partidos que no están resignados a la derrota ante Sebastián Piñera". En esa misma línea aseguró que el ex mandatario es "hipervulnerable", argumentando que durante la competencia entre ambos en 2009, el empresario estuvo debajo de él en las encuestas por dos años antes de la contienda.

A pesar de lo anterior, el abanderado del PRO, asegura que otro de los motivos que lo impulsan a generar puentes con el PC es que "Piñera encarna el retroceso y Piñera tiene chance de ganar si vamos divididos".

Enríquez-Ominami detalló que se perseguirán dos cosas en la relación con el PC. Por un lado propondrán "un pacto de gobernabilidad" y por otro, una lista parlamentaria que garantice "que quien sea Presidente, el 'más mejor'. tiene que contar con los otros contrincantes del mismo domicilio, que aunque tengamos diferencias, nuestras fuerzas parlamentarias, aunque tengas 1, 4 u 11 diputados, sea un grupo que no bloquee y que ayude a mejorar las reformas".

En el año 1999, el candidato del PRO participó activamente de la campaña que convirtió en Presidente a Ricardo Lagos. El abanderado justifica esta acción argumentando que "yo apoyé fuertemente una fuerza que derrotara a Joaquín Lavín, y no me equivoqué". 

Sobre la posibilidad de que el ex mandatario le gane a Piñera en estas elecciones, MEO aseguró que "gane el "más mejor". Al día de hoy, la primera vuelta presidencial será la gran primaria, pero si hay voluntad, nos vemos el lunes con Ricardo Lagos y Alejandro Guillier y empezamos a hablar de primarias. Con todos y para todos".

MEO fue uno de los fundadores del progresismo en Chile y asegura que actualmente en Chile, esos valores, "son minoría" y que el giro a la derecha de algunos gobiernos Latinoamericanos, como en Argentina con Macri o Perú con Pedro Pablo Kuczynski, es una señal de que "no estamos dialogando con la clase media. No somos capaces de relacionarnos con ella".

"Todo indica que Chile va a ser otra evidencia más de que los valores progresistas están a la baja. Entonces, hay que trabajar el doble. Es por eso que la reunión con los comunistas la he fomentado mucho".

"Voy a demostrar mi inocencia"

El 2015 y 2016 fueron años complejos para el candidato progresista. Un correo electrónico evidenció una presunta participación de financiamiento irregular a través de la empresa SQM y luego un reportaje reveló sus vínculos con la cuestionada empresa brasileña OAS, quienes le abrían facilitado un avión durante su última campaña presidencial.

Al respecto, MEO señala que "es evidente que hay gente que creyó las acusaciones" y agrega que "una cuota tendré yo de culpa por dar entrevistas no bien dadas y otra la tendrán mis adversarios, que de mala fe tratan de encubrir sus actos de corrupción. Hay un ex Presidente que está acusado en Argentina. La diferencia es que yo los presumo inocentes hasta que se demuestre lo contrario".

Todos estos episodios y especialmente la arista de SQM han provocado que el Frente Amplio declaré públicamente no querer apoyar al candidato por estar siendo investigado. Sobre esto, el líder del PRO aseguró que, a su juicio, está equivocada la lógica de la coalición naciente y que "cualquier Frente Amplio supone amplitud y no partir vetando".

Finalmente indicó que "voy a demostrar mi inocencia ante todas esas acusaciones". 

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