"Chile está enfrentando la crisis sanitaria más importante del último siglo, la que mal manejada se puede transformar en la crisis laboral y económica más grave de nuestra historia". Esta es parte de la advertencia que realizan los partidos de la oposición en su conjunto frente a la emergencia que vive el país producto del Coronavirus, que a la fecha suma más de 4 mil casos confirmados.

En una declaración firmada por los partidos de la ex Nueva Mayoría, el Frente Amplio, el Partido Progresista, entre otros, plantean que "la máxima prioridad de todos debe ser la salud de las personas y eso requiere que las familias puedan quedarse en sus casas, sin el agobio de no poder llegar a fin de mes".

Y plantean la necesidad de "un plan fiscal proactivo y de la envergadura que la profundidad de la crisis demanda", para lo cual comprometen sus votos.

Este plan, dicen, debe permitir "extremar políticas de testeo, control, cuarentena y aislamiento, haciendo prevalecer el sistema público y la solidaridad en las acciones de salud, ya que la desigualdad en el acceso, profundiza las diferencias, y que evite la especulación en los insumos".

Las medidas que proponen son las siguientes:

Resguardar los ingresos de las familias

A través de una Renta Básica de Emergencia, Seguro Familiar u otro instrumento. Y proponen "un programa de rentas a toda la población que se quede sin ingresos hasta finalizada la urgencia sanitaria".

Y plantean la necesidad de "aliviar los gastos de las familias a través de la postergación de pagos y prohibición de corte de los servicios básicos mientras dure la emergencia sanitaria". "A su vez la postergación, sin intereses, de cuotas de créditos hipotecarios, estudiantiles u otras contraídas con Bancos e instituciones financieras, casas comerciales", agregan.

Proteger a las Pymes e impedir despidos

Los partidos proponen medidas para "Proteger a las PYMES, empleos y economía, evitando una recesión más profunda y duradera, por lo que proponemos el ingreso con urgencia de un Proyecto de Ley de apoyo estatal a las empresas en período de crisis".

Y expresan la necesidad de "cuidar los empleos prohibiendo el despido de trabajadores y trabajadoras y de ser necesario, salvando empresas estratégicas o de importancia para el país de la quiebra, evitando efectos negativos en el resto de la población mediante inyección de recursos a cambio de adquisición por parte del Estado de participación en el mayor valor de dichas empresas rescatadas".

Una medida que busca ir más allá de la nueva ley de "protección del empleo" promovida por el gobierno, que permite a empresas que no están funcionando, suspender los pagos a sus empleados, pero manteniendo la relación laboral. Y que los funcionarios puedan recibir parte de sus ingresos a través del seguro de cesantía mientras se extiende la crisis.

"Un plan de estas características requiere un financiamiento sin precedentes en la economía chilena, para lo que creemos nuestro país, por sus ahorros y condiciones de endeudamiento, está preparado", plantean.

En este sentido, la oposición enfatiza que el Gobierno "contará con nuestro apoyo legislativo para llevarlo adelante, aumentar la deuda y hacer mayores retiros de los distintos fondos que tiene el Estado".

Esto, dicen, "para que el Gobierno no pierda un segundo más e impulse una respuesta del Estado, en que se pueda representar a todas las fuerzas políticas y sociales del país, en beneficio de las personas".

Publicidad