El presunto autor de los sangrientos tiroteos en Minnesota, Vance Boelter, dejó un inquietante mensaje de despedida antes de convertirse en el objetivo de una intensa búsqueda por parte de las autoridades. Según David Carlson, el mejor amigo y compañero de habitación de Boelter, el presunto pistolero envió un escalofriante mensaje de texto horas antes de cometer los asesinatos que han conmocionado a la región.

Boelter, quien se cree que fue el autor de los asesinatos de la presidenta demócrata de la Cámara de Representantes, Melissa Hortman, y su esposo, además de gravemente herir al senador John Hoffman y su esposa, aún se encuentra prófugo. El sospechoso, que se disfrazó de oficial de policía y usó una máscara de látex, fue identificado por el FBI como la principal persona de interés en este caso.

El último mensaje: "Puedo morir pronto"

David Carlson, al leer el último mensaje de texto de su amigo de toda la vida, relató el contenido del mensaje a los medios: "David y Ron, los amo, muchachos. Tomé algunas decisiones y ustedes no saben nada al respecto, pero estaré ausente por un tiempo. Puede que muera pronto, así que solo quiero que sepan que los amo a ambos y desearía que no hubiera sido así". Los textos fueron enviados alrededor de las 6 de la mañana, después de los tiroteos. Carlson, preocupado por el contenido, alertó a la policía de inmediato, temiendo lo peor para su amigo.

A medida que las autoridades avanzaban en la investigación, los detalles de la vida de Boelter comenzaron a salir a la luz. A pesar de ser conocido como una figura tranquila y sin problemas, Carlson confesó que Boelter estaba atravesando una grave crisis financiera y personal. "No era una persona odiosa, pero necesitaba ayuda", comentó Carlson, quien reveló que su amigo estaba luchando con varias dificultades antes de la tragedia.

La situación se complicó aún más cuando la esposa de Boelter, Jenny Boelter, fue detenida en una parada de tráfico cerca de Onamia, Minnesota. La policía encontró armas, pasaportes y municiones en su vehículo, lo que generó más inquietudes sobre la posible implicación de la pareja en los crímenes. Sin embargo, Jenny Boelter no fue arrestada, aunque se encuentra bajo interrogatorio.

El FBI ha emitido una advertencia, considerando a Vance Boelter como un individuo armado y peligroso, y ha ofrecido una recompensa de 50.000 dólares (unos 47 millones de pesos chilenos) por cualquier información que conduzca a su captura. La última vez que fue visto, Boelter llevaba un sombrero de vaquero claro, una camisa oscura de manga larga y pantalones claros, y se encontraba en el área de Twin Cities.

 

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