En octubre de 2017 se convirtió en la primera y única mujer en arbitrar partidos de fútbol profesional en una división masculina. Actualmente Bibiana Steinhaus es árbitra en la Bundesliga, la competencia entre los mejores equipos de Alemania y una de las ligas más respetadas en el mundo, donde se ha ganado críticas, insultos e incluso censuras, solo por ser mujer.

No le gusta estar en el foco, dice que cuando los titulares son sobre los árbitros es porque no se ha puesto la atención en el partido y no quiere que la vean a ella, sino al juego. Pero entiende que su trayectoria la convierte no solo en pionera, sino que además en un modelo a seguir. Desde 2007 alternó entre la segunda y la tercera división hasta ganarse un lugar en primera división de la Bundesliga. Ha sido premiada en cinco ocasiones por la Federación Alemana de Fútbol por su desempeño.

Es policía de profesión y en 1995 obtuvo su licencia de arbitraje, siguiendo los pasos de su padre. Su primer partido como árbitro fue a los 20 años. Ha tenido apariciones en la copa de Alemania desde 2008 y también ha dirigido partidos a nivel internacional: en la Copa Mundial Femenina de Fútbol Sub-20, la Eurocopa Femenina, la final de la Copa Mundial Femenina de Fútbol de 2011, la final de los Juegos Olímpicos de 2012 y la final de la Liga de Campeones Femenina de la UEFA. Pero su sueño era la Bundesliga, y el llamado llegó para la temporada 2017-2018; Bibiana ha dicho que se llenó de alegría, curiosidad y tantas otras emociones, y que es un empuje para seguir trabajando duro.

En mayo de este año, acusaron que en un partido retransmitido por la televisión estatal de Irán no se mostró ningún primer plano de la árbitra alemana, ya que en ese país las mujeres no tienen permitido entrar a los estadios de fútbol. Dentro de la cancha tampoco ha sido fácil ganar respeto. En octubre de 2010, Peter Niemeyer, del conjunto capitalino, tocó por accidente uno de sus senos y los tabloides festinaron con el  suceso. En abril de 2012 Stefano Molinaro se preparaba para ingresar como cambio y se bajó los pantalones frente a Steinhaus que estaba de cuarta árbitra. En 2015 Kevin Demirbay dijo que “las mujeres no pertenecen en un juego de hombres”, luego de que Bibiana le mostrara una tarjeta amarilla. Todas estas acciones se las toma con humor y como parte de la prueba que implica controlar a 22 personas de carácter muy distinto.

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