Una inesperada goleada de 4 a 0 le bastó al Liverpool para eliminar al FC Barcelona en la semifinales de la Champions League y de paso desatar una supuesta crisis en el camarín, puesto que los catalanes perdieron una llave que dominaban con comodidad.
Y es que los catalanes llegaban con una ventaja abultada de 3-0 bajo el brazo, por lo que marcar un gol casi que aseguraba su paso a la gran final que se disputará en el estadio Wanda Metropolitano de Madrid.
Sin embargo, los adiestrados por Jürgen Klopp realizaron un gran partido dejando KO a Messi y compañía, quienes no encontraron respuesta ante la arremetida de los que "nunca caminan solos".
Ruptura de camarín
La caída habría provocado un quiebre en el vestuario. Al menos así lo sentencia el diario Sport, que señala que "el golpe ha sido tan duro que incluso de puertas hacia adentro se respira un ambiente extraño. De frialdad".
Situación totalmente distinta a otra eliminación histórica en Roma en 2018, donde luego del fracaso el plantel se mostró completamente unido. Ahora, ningún jugador posteó nada, en ninguna red social.
Y el problema de camarín estaría en la crítica sobre el último gol que encajó Liverpool por la falta de concentración en la defensa.
"La sorpresa que se llevó Busquets al enterarse de que, instantes antes, Luis Suárez había dicho que el equipo "parecía de juveniles" en el 4-0. Piqué, portavoz en tantas otras ocasiones, prefirió guardar silencio", agrega el medio español.
Además Sport señala que el ambiente no es bueno, puesto que "en el vestuario no existe ya el convencimiento de que todos están juntos en esto, pues hay muchos frentes abiertos".
Con todo, al Barcelona todavía le falta disputar algunos partidos intrascendentes de la liga española que ya aseguraron y la gran final de la Copa del Rey contra el Valencia el próximo 25 de mayo.
