Tras la muerte de Francisco: Cómo se elegirá al nuevo Papa y cuáles son los plazos
Existe pesar en la Iglesia Católica tras la muerte del Papa Francisco a los 88 años, quien falleció durante la madrugada de este lunes 21 de abril tras una serie de complicaciones médicas.
El viernes 14 de febrero de 2025, Francisco ingresó en el hospital Gemelli de Roma aquejado de una bronquitis. Le diagnosticaron una neumonía en ambos pulmones que requirió un intenso tratamiento y puso su vida en peligro. Finalmente fue dado de alta el 23 de marzo.

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La última aparición del Papa fue el pasado domingo 20 de abril, donde se dirigió a los feligreses para Pascua de Resurrección.
Por el momento se desconoce la fecha exacta del inicio del funeral del Papa, pero se espera que su cuerpo esté expuesto en la Basílica de San Pedro en un ataúd simple y no en un catafalco desde esta tarde.
Francisco afirmó a finales de 2023 que quería simplificar los funerales papales y anunció su deseo de ser enterrado en la basílica de Santa María la Mayor de Roma, y no en la de San Pedro.
¿Cómo se elegirá al nuevo Papa?
Tras la muerte del Papa Francisco, la gestión de los asuntos vaticanos quedará temporalmente en manos del cardenal camarlengo, Kevin Farell, mientras se celebran los nueve días de exequias y transcurre el plazo, de entre 15 y 20 días, para organizar un cónclave que elija al nuevo sumo pontífice.
Mientras tanto, es el cardenal camarlengo, el irlandés Kevin Farell, quien ocupará el cargo interinamente.

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Se puede votar hasta cuatro veces al día en el Cónclave, dos en la mañana y dos en la tarde. Son alrededor de 138 los cardenales electores que podrán votar, quienes deben tener menos de 80 años. Durante este proceso, los cardenales son aislados del exterior.
Cuando la votación no obtiene el quórum necesario, sale humo negro por la chimenea de la capilla Sixtina. En cambio, cuando se elige al nuevo Papa, sale humo blanco (fumata bianca).
En caso de no lograr acuerdo, al día siguiente se vuelve a votar en un máximo de cuatro veces. No hay tiempo límite para el Cónclave.
Para que un sumo pontífice sea elegido se necesita una mayoría de dos tercios. De ser 138 los electores, se necesitan 92 votos.
Una vez que el Papa elegido acepte el cargo y escoja su nombre, el cardenal protodiácono lo anuncia desde el balcón de la Basílica San Pedro.

