Ocho marines estadounidenses permanecían hospitalizados el lunes, uno de ellos en cuidados intensivos, tras el accidente de una aeronave militar en el norte de Australia en el que murieron tres de sus compañeros.
El Boeing MV-22B Osprey, una aeronave de despegue vertical, se accidentó el domingo en la isla Melville, al norte de Darwin, con 23 marines estadounidenses a bordo durante un ejercicio militar de rutina para tropas locales.
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La jefa del gobierno provincial de Territorio Norte, Natasha Fyles, dijo que ocho soldados seguían hospitalizados y que quiere "asegurar a sus familias que están recibiendo la mejor atención posible".
Las autoridades abrieron una investigación e intentan recuperar los restos de los tres soldados muertos.
El comisario policial de la provincia del Territorio Norte, Michael Murphy, declaró a periodistas que la recuperación de los cuerpos y la investigación serían "prolongadas, largas y complejas", y que las autoridades prevén estar "al menos 10 días" en el sitio.
Señaló que se trata de un lugar lleno de arbustos, lo que complica las tareas.
El norte de Australia se convirtió en base importante para las fuerzas armadas estadounidenses en los últimos años, en que Washington y Canberra han trabajado conjuntamente para contrarrestar la creciente influencia china en la región de Asia Pacífico.
El secretario estadounidense de Defensa, Lloyd Austin, elogió a los soldados caídos, de quienes dijo "sirvieron a nuestro país con coraje y orgullo".
El Osprey es una aeronave capaz de despegar y aterrizar como un avión o verticalmente como un helicóptero.
